El alcalde de Villena, Fulgencio José Cerdán Barceló, ha comparecido esta mañana para informar de la situación de incidencia del coronavirus en el Ayuntamiento de Villena. Tal y como ha señalado, los casos positivos del geriátrico y el centro de Peñarrubia aumentaron considerablemente la curva de contagio de Villena, lo que ha perjudicado totalmente la evolución pandémica del municipio. Además, tuvieron un pico adicional por nuevos positivos detectados en el centro de menores en la segunda ola y la semana pasada en la prisión de Villena.
“Son atendidos por los médicos de nuestra ciudad, por lo que todos esos positivos se cuentan en Villena, lo que produjo el aumento del nivel de casos COVID y ha costado más que la curva se reduzca”, ha explicado el alcalde.
¿Cuál es la situación actual de Villena?
En esta tercera ola, y como ha aclarado el alcalde a través de las gráficas de Sanitat, en el municipio del Alt Vinalopó el 29 de enero había 900 casos positivos de coronavirus y, a día de hoy, hay 129 casos diagnosticados en los últimos 15 días. Por lo que la incidencia ha bajado considerablemente y mantiene una tendencia decreciente, con solo 21 casos desde la última actualización, una cifra afortunadamente muy lejana de los más de 200 casos que tenían de media en 3 o 4 días, hace tan solo unas semanas. De hecho, la semana pasada solo hubo 35 casos.
¿Qué restricciones se levantan según Decreto de Alcaldía?
El Teatro Chapí y la Casa de Cultura reabren, pero con el aforo limitado al 33%. Además, la Biblioteca la Paz recupera préstamos de libros, en horario de 9:00 a 11:30h, tal y como hicieron la semana pasada con la Biblioteca miguel Hernández.
El alcalde ha indicado que el resto de medidas se mantienen hasta el próximo 2 de marzo, a la espera de lo que estipule la Consellería de Sanitat. “Vamos a seguir siendo prudentes”, ha asegurado.
¿Cuáles van a seguir las siguientes fases de vacunación en Villena?
Según ha explicado Cerdán, ahora están vacunando a los mayores de 90 años y los siguientes serán los mayores de 80.. “Es una logística complicada porque hay muchos mayores que no pueden salir de su casa y se complica al tener que ir a domicilio”.