En el marco del nuevo coronavirus como una pandemia, la mayoría de entidades están tomando medidas oportunas para garantizar el bienestar de los integrantes más vulnerables. En ese sentido, las residencias de ancianos públicas y privadas de la Comunidad Valenciana en las que se produzcan brotes de coronavirus pasan al control y protección de la Conselleria de Sanidad, la cual tendrá plena capacidad de monitoreo para evaluar la situación y tomar las decisiones convenientes.
Así lo ha asegurado la consellera de Sanidad, Ana Barceló, quien mencionó haber firmado una resolución al respecto, que estará en funcionamiento el tiempo que dure la pandemia.
En la residencia de Alcoy (Alicante), hay 134 residentes, de los cuales 58 permanecen aislados con síntomas, y 8 de ellos están siendo controlados con una unidad hospitalaria domiciliaria que depende del departamento alcoyano. Asimismo, se ha reforzado la atención con mayor personal médico. Entre ellos, cuatro enfermeros y cuatro auxiliares, que se unen a otras 31 personas.
Desde el día 14 de marzo se ha facilitado el material necesario para desarrollar su trabajo adecuadamente, entre medicamentos y soportes a la unidad hospitalaria a domicilio. En la residencia de Elche (Alicante) hay 116 ancianos con síntomas. Entre ellos, tres habían sido aislados en el centro y, tras hacerles la prueba de coronavirus, han resultado los tres casos negativos.
En el Hospital General Universitario de Elche hay cinco personas ingresadas pero no están relacionados con la residencia. En la residencia de ancianos de Torrent (Valencia), hay 77 residentes, ´de los cuales 51 aislados con síntomas y 38 hospitalizados, 32 de ellos en planta y 6 en la UCI. En este lugar, se han incorporado 20 enfermeros, 34 técnicos en cuidados auxiliares de enfermería (TCAE) y dos médicos.
Medios para hacerse cargo de la asistencia
La resolución tiene como objetivo centrar el esfuerzo en frenar el virus, sobre todo en estos centros, puesto que albergan a una gran población de riesgo. Incluso, a principios de marzo, el Ministerio de Sanidad hizo público un nuevo protocolo especial para residencias de personas mayores. En este documento se solicitaba limitar las visitas de familiares, brindar material de protección a los trabajadores, colocar carteles con información sobre higiene y limpieza personal, asimismo, la instalación de dispensadores con solución hidroalcohólica, pañuelos desechables y contenedores de residuos.
De la misma forma, se demandó la evaluación constante de síntomas de infección respiratoria y fiebre de los residentes. La medición de la temperatura corporal se debe realizar con termómetros desinfectados previa y posteriormente de su uso. Aunque, de acuerdo al portal www.reviewbox.es, hay termómetros digitales por infrarrojos que calculan la temperatura mediante la radiación que emite el cuerpo en un segundo y, lo más importante, no necesitan mantener contacto físico con el cuerpo, no todas las residencias cuentan con este elemento. Por lo cual, la desinfección de estos elementos es imprescindible.
Hasta el momento, no existe un tratamiento antiviral específico, pero se están realizando investigaciones. Las personas con coronavirus reciben atención de apoyo para aliviar los síntomas prescribiendo medicamentos para el dolor o la fiebre. Los empleados de centros de salud utilizan un equipo de protección para evitar la autocontaminación y tratar a los pacientes. Esto se compone de varios elementos como guantes, protección respiratoria, trajes y protección para ojos.
