El próximo lunes se inician las obras de renovación de la canalización de agua potable y alcantarillado en la calle Ondulada de Benidorm que traerán también una serie de mejoras como la ampliación de baldosas antideslizantes y de tendido eléctrico de media tensión. Las obras tendrán una duración aproximada de tres meses y un presupuesto de 237.910,17 euros, según ha explicado el concejal de Espacio Público, José Ramón González de Zárate.
La obra en esta calle se iba a realizar con los fondos de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (EDUSI), pero según ha precisado el concejal, “hemos decidirlo hacerlo antes a causa de las quejas por las caídas debido a la inclinación de la calle y la poca adherencia del suelo”.
En una primera fase los trabajos se desarrollarán en esta calle en el tramo entre Santa Cristina y la avenida de l’Aigüera, aunque sin afectación a ninguna de estas vías. Las calles Santo Tomás y San Marco quedarán, por su parte, habilitadas como ‘fondo de saco’ para que los vecinos residentes puedan acceder a los vados.
Antes del comienzo de la intervención se han efectuado trabajos preliminares para habilitar los obligados desvíos de tráfico y lograr que la afección a la movilidad peatonal y de vehículos sea mínima. En ese sentido, el concejal de Espacio Público, José Ramón González de Zárate, ha precisado que “jugaremos con la obra para que en Semana Santa no haya dificultades con el tráfico. Daremos permeabilidad a los vecinos para que puedan acceder y salir de sus viviendas”.
Mejorar la accesibilidad y los servicios
Además de las actuaciones citadas, se ha acordado con Iberdrola que instale un nuevo tendido eléctrico de media tensión de canalización subterránea que complementará el cambio de alumbrado público que se realizará con el programa financiado con fondos del IDAE. Igualmente se ha pactado con el promotor de un parking público en altura que se está ejecutando en la calle que se encargue de urbanizar el tramo correspondiente a su fachada con acera antideslizante y nuevo asfaltado.
El concejal ha destacado que es una obra “muy importante que mejorará mucho la accesibilidad y todos los servicios”. De ahí que González de Zárate recordase que “había problemas con la actual pavimentación porque las personas se resbalaban en días de lluvia y hace tiempo que queríamos cambiarlo”. Antes de hacerlo, ha continuado “analizamos si había que cambiar las infraestructuras y al confirmar que sí, se ha realizado una memoria valorada y serán trabajos financiados por la concesionaria Hidraqua con cargo al Fondo de Inversión”.
Los informes técnicos habían determinado al respecto que las actuales infraestructuras de la calle están en un estado de deterioro avanzado a causa de su antigüedad y necesitan de una adecuación de materiales. Así, la calle Ondulada dispone de una infraestructura de agua potable de fibrocemento, “lo que puede causar problemas de salud a quienes manipulan y operan con dicho material”. González de Zárate ha explicado al respecto que con esta renovación “se gana en más potencia, calidad y ahorro, ya que se producían filtraciones”.
En cuanto a la red de alcantarillado, está formada por colectores de mucha antigüedad que presentan un deterioro estructural y dan lugar a problemas de emboces y de drenaje. Lo que se pretende con esta sustitución es “mejorar las condiciones de suministro y actualizar los materiales de las canalizaciones, cambiando el fibrocemento por fundición dúctil y el material inadecuado de las acometidas de agua potable”.
