Los conductores de autobuses interurbanos de La Alcoyana barajan iniciar huelga indefinida en L’Alacantí si no se atienden sus reivindicaciones para mejorar sus condiciones de trabajo. Llevan ya ocho meses de huelga en los servicios nocturnos por este mismo propósito pero sin recibir soluciones por parte de las administraciones públicas.
El jueves 26 de enero se concentrarán en la plaza del ayuntamiento de Alicante, coincidiendo con la celebración del pleno municipal, para buscar la mediación y respaldo del consistorio y visibilizar su situación.
La Confederación General del Trabajo (CGT) explica que las condiciones laborales han originado que el nivel de baja por enfermedad supere el 20%, y está perjudicando a los usuarios. “Largos tiempos de espera en las paradas y buses completos a los que es imposible acceder” son algunos de los problemas que derivados.
También acusa a la empresa Vectalia de pretender “prestar el servicio con menos unidades de autobuses de las necesarias para el correcto funcionamiento que merece la población de Alicante y su área metropolitana”. Y recuerda que el sistemas TAM se creó para optimizar los recursos y no generar diferencias de prestación del servicio entre los distintos municipios”.
El colectivo denuncia, entre otros, “jornadas de trabajo de hasta 9 horas en las que no van computados todos los tiempos de trabajo, tiempos de recorrido insuficientes sin descanso estipulado, autobuses con un pésimo mantenimiento, ausencia de aseos en cabecera, falta de seguridad y una importante pérdida económica en los últimos 10 años en los que ha sufrido DOS E.R.T.E’S y subidas salariales ínfimas en algunos casos del 0,5%”.
Además, considera que la puesta en marcha de la división en dos de la concesión por parte de Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad agravará su situación y repercutirá en el servicio al usuario.
El sindicato manifiesta además que los conductores y conductoras están sufriendo “presión, expedientes y sanciones, e incluso despidos, por parte de la empresa en situaciones derivadas de la mala organización del servicio”. Y que en su negociación bilateral esta ha afirmado que no va a modificar las condiciones laborales.
El colectivo celebró huelga el pasado junio, coincidiendo con Hogueras, con tiempos de espera de hasta dos horas para llegar a San Vicente del Raspeig y El Campello.
En su reunión, previa a esta huelga con la consellera de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Rebeca Torró, esta se comprometió a estudiar las reivindicaciones del colectivo y ver «qué margen de actuación» tenía según informó el sindicato.
