Mediante un comunicado de Ignacio Ferreiro, Podemos Sant Joan traslada su su propuesta de peatonalizar parcialmente el centro del municipio para facilitar el acceso a viandantes cumpliendo las medidas de seguridad sanitarias.
Para llevar a cabo esta medida, tendrían que habilitar el espacio que actualmente se dedica a los coches a las personas, tanto para su desplazamiento, como para el acceso a los comercios, mercado y terrazas.
No obstante, desde Podemos Sant Joan, aclaran que tendrían en cuenta la libre circulación de vehículos privados de residentes, transporte público, taxis y vehículos de carga y descarga.
Por lo tanto, Ferreiro propone una peatonalización parcial de los principales ejes comerciales del Centro: La Rambla – Jaume I, Tomás Capelo – Mossen Pedro Mena, Doctor Gadea, L’Ordana, y Calle del Mercado, que concentran la mitad de la oferta del comercio minorista de Sant Joan, además del Mercado Municipal y Mercadillo ambulante (recientemente aprobada su reapertura).
“La calle del Mercado es muy estrecha y con la afluencia de gente es imposible mantener las distancias de seguridad. Como no hay tráfico , se deberían peatonalizar algunas calles para dar paso solo a residentes y servicio”, indica el concejal.
“Estas calles son las más transitadas por la gente del pueblo para hacer sus compras y, algunas, cuentan con aceras de 1’50 de ancho, lo que hace imposible respetar las distancias de seguridad de 2 m. Creemos que esta medida permitirá el cumplimiento de la normativa sanitaria junto con la reapertura y reactivación de la economía local”, añade.
Podemos también propone, para la Rambla y Jaume I, un carril único para el tráfico rodado aprovechando la zona de aparcamiento para ampliar la acera y uso para terrazas de bares y restaurantes, lo que facilitaría el montaje de las mismas garantizando las medidas de seguridad, ya que su extensión se haría ocupando las bandas de aparcamiento. El carril único lo compartirán el transporte público, autobús y taxi, con bicicletas y tráfico de residentes; nunca a una velocidad superior a los 30 kilómetros por hora.
Como parece que esta medida aumentaría el problema latente de aparcamiento del municipio, Ferreiro recuerda que “el parking subterráneo de la plaza de l’Ordana lleva cerrado años y ahora es el momento de abrirlo”.