Dos meses después de que el Pleno de Alicante aprobara de manera provisional la Ordenanza de Protección Contra la Contaminación Acústica y Vibraciones, el pasado 27 de abril, la Asociación de Vecinos Laderas del Benacantil insta al Ayuntamiento a poner en marcha las medidas necesarias que les permitan conciliar el sueño durante la noche.
Según avanzaba a principios de junio el Ayuntamiento, será previsiblemente este mes de julio cuando se lance el Plan Zonal Específico de la Zona de Protección Acústica Especial Casco Antiguo de Alicante junto a la aprobación de la Ordenanza Municipal de Protección Acústica. La intención es que “la nueva normativa con las medidas específicas pueda iniciar su tramitación y estar aprobada antes de finalizar el año”. Y, como primera declaración de intenciones, el Consistorio anunciaba a fecha de 1 de junio sus primeras medidas: suspender nuevas licencias para pubs, así como reducir horarios y veladores, entre otras.
El colectivo vecinal apremia a que se apruebe este Plan Zonal o mapa del ruido y “adoptar las medidas de control e inspección con carácter continuo y permanente” tal y como se contemplaba en la declaración de Zona Protegida Acústica Especial (ZPAE), el 13 de agosto de 2018
Así, reiteran la conclusión del Síndic de Greuges para adaptar la normativa municipal como Zona Protegida Acústica Especial (ZPAE). “En ella se especifica claramente las limitaciones del Grupo II, es decir pubs, discotecas, bares, salas de fiestas y de baile, estas actividades quedan prohibidas en toda la zona Alta en el plano de zonificación. Asimismo se establece una distancia mínima de 50 metros entre establecimientos de este mismo Grupo II”.
También reclaman que se adapte a la Ley 7/2002, de 3 de diciembre, de la Generalitat, de Protección Contra la Contaminación Acústica, y su desarrollo reglamentario. Y, en este sentido, urgen al Ayuntamiento a que adopte “todas las medidas inspectoras, preventivas y sancionadoras, que sean necesarias para eliminar la contaminación acústica existente en la zona del casco antiguo”. Así como que valore la posibilidad de declarar Zona Acústicamente Saturada el Casco Antiguo.
Los vecinos de esta zona del centro histórico se vienen quejando del ruido de botellones y personas que frecuentan bares y pubs hasta altas horas de la madrugada. “Con horarios de cierre incluyendo en días laborables, de 3:30 horas a 4 de la mañana todos los días del año“. Por este motivo reclaman al Ayuntamiento que siga con la aprobación de la normativa, que realice el Plan de Acción Zonal para erradicar el ruido “allí donde se encuentra y quien lo produce y sobre todo que aplique las medidas que se requieran”.
En el último año y medio la entidad pasó por registro “más de 500 denuncias de vecinos, hoteleros y emprendedores sobre el ruido“, especialmente, en horario nocturno, además de haber protagonizado diferentes concentraciones, que finalmente movieron a aprobar esta normativa un mes antes de las elecciones y a constituir una comisión no permanente.
“Dentro de nuestra asociación, como es público y notorio, tenemos dueños de hoteles, pensiones, boutiques, pisos turísticos, cafeterías y negocios variados, además de por supuesto los que hemos estado aquí muchos años sufriéndolo permanentemente, los vecinos, incluyendo familias con trabajos que requieren descansar en horario nocturno con normalidad, algo que consideramos de sentido común”, señalan las mismas fuentes de la asociación.
Junto a la suspensión de nuevas licencias y la reducción de horarios y veladores anunciados a principios de junio, el Ayuntamiento ha propuesto, asimismo, el establecimiento de tres zonas de protección acústica por grado de saturación, la regulación de la carga y descarga, el refuerzo de la vigilancia policial o el desarrollo de campañas de sensibilización.