La Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública ha confirmado el primer caso de viruela del mono en la Comunitat Valenciana. Se trata de un varón de la provincia de Alicante que ha pasado de ser sospechoso positivo esta misma mañana. Este ha sido uno de los posibles casos que se estaba estudiando durante las pasadas semanas.
La viruela del mono en España
El Ministerio de Sanidad ha notificado este jueves 24 nuevos positivos de viruela del mono y ya son 156 confirmados en total, lo que sitúa a España como el segundo país con más casos detectados, por detrás de Reino Unido.
El Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) ha recibido muestras pertenecientes a 328 casos sospechosos hasta la fecha. De ellas, 172 han dado negativo para viruela humana y para otros orthopoxvirus, por lo tanto, se descartan como casos.
España es, junto con Reino Unido y Portugal, uno de los tres países donde más casos de viruela del mono se han detectado fuera de África. Casi todos los afectados españoles se han localizado en Madrid, aunque también en otras comunidades autónomas. Ante esta situación, se ha activado la alerta sanitaria, pero las autoridades recalcan que el riesgo de que se produzca una nueva pandemia es realmente bajo.
¿Cómo se contagia la viruela del mono?
El virus de la viruela del mono no se propaga fácilmente entre las personas y el riesgo para la población es bajo. Se puede transmitir por vía respiratoria, pero por las características de la mayor parte de los casos todo apunta a un contacto con fluidos. Su transmisión tiene lugar a través de un contacto con heridas, fluidos corporales, gotículas y material contaminado, como ropa de cama, y su periodo de incubación suele ser de seis a trece días, aunque puede ir hasta los 21 días.
Tal y como han detallado las autoridades sanitarias británicas y las de la Comunidad de Madrid, todos sus casos son hombres que han mantenido relaciones homosexuales, por lo que recomiendan a estas personas que estén atentas ante cualquier erupción o lesión inusual en cualquier parte del cuerpo, especialmente en los genitales. En todo caso, recalcan que no se trata de una enfermedad de transmisión sexual, ni tampoco que afecte exclusivamente a un determinado colectivo.
