El pasado 17 de marzo, sobre la 15:40 horas, una dotación de la Policía Local de Elche fue comisionada por su Sala de Operaciones por una llamada que alertaba de la presencia de su cuñado, con orden de alejamiento, en su hogar.
Según explicó la requirente, tras llegar a su domicilio lo encontró en el interior. Había entrado con las llaves para, presuntamente, tratar de llevarse al perro. Al ser sorprendido, esta le recriminó su presencia y no haber respetado la orden de aproximación a su persona, mostrando reticencias en un primer momento a abandonar la casa, aunque lo hizo instantes después.
La patrulla local buscó al implicado por las inmediaciones, encontrándolo a unos escasos cincuenta metros y mostrando una actitud altiva y agresiva con los agentes, pudiendo calmarlo hasta que se confirmó la vigencia de la orden, cuando al proceder a su detención ofreció una fuerte resistencia.
El hombre fue detenido y trasladado a dependencias policiales, no cejando en su actitud hostil y despectiva hacia los agentes locales, propinándoles patadas y causándole lesiones a uno a su llegada al centro de salud.
