Compromís vuelve a reivindicar un transporte público de calidad y denuncia las carencias del servicio ahora que en septiembre ha acabado el servicio de la línea 31, el único autobús que conecta Mutxamel y Sant Joan con la playa. Un servicio que solo funciona en verano pero que su funcionamiento es esencial todo el año para muchas personas que se desplazan para trabajar, estudiar, hacer deporte o como trayecto alternativo para llegar a Alicante.
La playa se sitúa a poco más de 2 km del centro de Sant Joan, pero a partir de septiembre se convierte en una zona inaccesible para muchas personas porque desaparece esta línea de autobús y, con ella, la única conexión existente. Además, en los meses de verano, el servicio es insuficiente porque solo hace un viaje en la hora, frecuencia que habría que ampliar para dar un mejor servicio a la ciudadanía.
Asimismo, esta línea actúa también como conexión alternativa a Alicante porque su trayecto no está tan colapsado como el de la línea 23 que transita por la Avda. de Dénia: se puede coger primero el bus hacia la playa (Mutxamel – Costa Blanca: 25 min; Sant Joan – Costa Blanca: 15 min), y después hacer transbordo al TRAM con la línea L3 en la parada de Costa Blanca (Costa Blanca – Pl. de los Caballos: 20 min). Por tanto, en 40 min. aproximadamente también se puede llegar a la capital.
Por otro lado, la formación recuerda que el itinerario de la línea C-53 que va al Campello no pasa por el casco urbano de Sant Joan y hay que ir a la Avda. Miguel Hernández para cogerlo. Es por ello que se debería estudiar su modificación incorporando una parada en el Centro de Salud y que se acerque al casco urbano, dando servicio a la gente de Sant Joan.
Una situación parecida al recorrido de la línea 38, que va desde la Universidad de Alicante a la playa de Sant Joan, pasando por el Hospital sin entrar en el municipio.
Compromís hace años que lucha para conseguir un servicio que responda a las necesidades de sus usuarios y usuarias para conectar de forma eficiente, sostenible y rápida Sant Joan con los pueblos del alrededor y, sobre todo, con Alicante.
Todavía queda mucho para tener una buena conexión con la capital que solucione los problemas actuales y por ello es clave impulsar cambios en los itinerarios y las frecuencias de la línea 23, como se propuso a las enmiendas que la formación presentó al proyecto de la Consellería. En los últimos meses también se ha hecho un duro trabajo para presentar las alternativas más realistas para conseguir que el TRAM llegue a Sant Joan lo antes posible.
