El cambio de hora en España de este mes de octubre está cerca. En la madrugada del sábado 30 al domingo 31 de octubre. Será cuando el horario de invierno entrará en vigor y se prorrogará hasta el último fin de semana del mes de marzo.
Con esta variación comienza el horario de invierno, por lo que amanecerá antes, aunque también anochecerá una hora antes. Este horario estará vigente hasta el mes de marzo, momento en el que comienza el de verano.
En Europa, el debate sobre este cambio de hora, que también se lleva a cabo en otros países, sigue abierto. Son muchas las personas que están en contra de atrasar y adelantar la hora dos veces todos los años, algo que se hace con el objetivo de ahorrar energía y ganar horas de luz.
¿Cuándo y cómo se hace el cambio de hora de invierno 2021?
Entonces, ¿cómo y cuándo se debe hacer ese cambio de hora en la madrugada del día 31? Habrá que modificar los relojes para que a las 03.00 horas vuelvan a marcar las 02.00 horas (horario peninsular). De esa manera, el domingo tendrá una hora más. Se le ‘ganará’ 60 minutos al día.
De esa manera, durante el horario de invierno amanecerá, pero a su vez anochecerá antes. Se ganará luz natural por la mañana, pero se perderá por la tarde.
¿Qué sucede los días posteriores al cambio de hora?
El cambio al horario de invierno puede acarrear algunos síntomas, especialmente en la población más vulnerable, como son los niños o las personas mayores. Hay pequeñas alteraciones de distinto índole que en unos días deben superarse. Estos van desde la somnolencia o cansancio a la falta de atención.
Una vez pasados estos cinco meses, en marzo de 2022 se volverá a cambiar la hora para adaptarse al horario de verano. Y será entonces entre la noche del sábado 26 al domingo 27 de marzo de 2022.
Curiosidades del cambio de hora en España
Durante los cinco meses que dura el horario de otoño-invierno, España se encuentra en la zona UTC +1 (Canarias en la zona UTC 0).
El horario de verano (en inglés se le conoce como DST o Daylight saving time) se utilizó por primera vez durante la Primera Guerra Mundial, con el firme objetivo de ahorrar carbón.
Una vez acabada la guerra, la mayoría de los países eliminaron dicho cambio. Después se ha empleado en la Segunda Guerra Mundial y, sobre todo, a partir de 1974 como instrumento para paliar la crisis del petróleo de la década de los 70.