La Guardia Civil alerta desde su cuenta de Tik Tok, después de detectar que se estaba convirtiendo en una tendencia llevarla entre los más jóvenes.
Este tipo de navaja no es legal al considerarse por el artículo 36.10 de la Ley de Seguridad Ciudadana un tipo prohibido. Llevarla se convertiría en una infracción con consideración grave: “Portar, exhibir o usar armas prohibidas, así como portar, exhibir o usar armas de modo negligente, temerario o intimidatorio, o fuera de los lugares habilitados para su uso, aun cuando en este último caso se tuviera licencia, siempre que dichas conductas no constituyan infracción penal“.
Las sanciones oscilan entre 601 y los 30.000 euros. Eso sí, la mayoría de las multas por portar este objeto en público se quedan en los 601 euros, si las autoridades lo estiman puede ascender a la astronómica cifra de 30.000 euros, cinco milloncejos de nada de las antiguas pesetas.
Este arma se ha podido encontrar en distintas páginas web. Están a la venta por apenas cuatro euros y se vende como una “navaja ultradelgada” dirigida principalmente a todo tipo de actividades.
Por su parte, los vendedores de este producto se defienden y aseguran que puede ser muy práctico en numerosas ocasiones. Incluso en situaciones de emergencia en las que sea necesario tener un utensilio cortante a mano.
Desde supervivencia o camping hasta prácticas más deportivas como buceo, pesca o caza. También se recomienda para pelar alimentos o picarlos.
El funcionamiento
La navaja tarjeta tiene la presencia de una tarjeta de crédito, aunque mide unos milímetros más que una tarjeta de crédito normal o un carné de identidad, por ejemplo.
En su forma trae tres partes, dos retráctiles a los lados derecho e izquierdo, con una doblez preestablecida, y una tercera parte que es la hoja.
La hoja de la navaja está extremadamente afilada y se esconde en el centro de la falsa tarjeta.
La reconversión de Tarjeta en navaja se hace en unos segundos tan solo hay que quitar un pequeño seguro que trae, voltear la hoja afilada y doblar las dos partes restantes de la tarjeta hacia el centro, de modo que abajo queden unos salientes que se machihembrarán al otro lado.
