Tres pacientes que fueron operadas por el mismo cirujano plástico detenido en Murcia han presentado en los últimos días denuncias ante la Policía tras sospechar que también pudieron ser víctimas de agresiones sexuales durante sus intervenciones quirúrgicas.
Las mujeres coinciden en que fueron operadas en el centro IMED Virgen de la Fuensanta, donde el facultativo alquilaba el quirófano.
Según sus testimonios, el médico intentó convencerlas para someterse a procedimientos adicionales a las operaciones de pecho, como liposucciones de muslos con el objetivo de inyectar la grasa en los senos. Las denunciantes expresan su temor a haber sufrido abusos sin poder recordarlo, ya que se encontraban bajo los efectos de la anestesia.
Una de las mujeres fue intervenida el 3 de diciembre, apenas un día antes del episodio que dio origen a la investigación judicial y que terminó con la detención del cirujano.
El vídeo que destapó el caso
La investigación se inició después de que dos enfermeras grabaran un vídeo en el que se observa al cirujano presuntamente agrediendo sexualmente a una paciente que se encontraba sedada durante una operación de pecho. Tras la difusión de la grabación, la Policía Nacional abrió diligencias y procedió a la detención del facultativo.
La causa quedó en manos del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 4 de Molina de Segura, cuya titular acordó el ingreso en prisión provisional del médico en el centro penitenciario de Sangonera, al apreciar gravedad de los hechos y riesgo de reiteración delictiva, dado que llevaba años alquilando quirófanos en distintos centros de la Región.
Testimonios que refuerzan la investigación
La investigación continúa abierta y la jueza está a la espera de recibir las declaraciones judiciales de las nuevas denunciantes, así como de volver a tomar testimonio a las enfermeras que grabaron el vídeo, considerado una pieza clave del procedimiento.
Una de ellas ha asegurado que “los movimientos de pelvis que el doctor llevó a cabo ese día ya estaba acostumbrada a verlos en otras ocasiones e inicialmente no le dio importancia”.
Otra fuente ha señalado que “este profesional era el único que habitualmente cambiaba la orientación de la camilla cuando iba a realizar una liposucción de piernas”, una circunstancia que dificultaba la visión del equipo sanitario.
Posibles más víctimas
Los investigadores no descartan que aparezcan más pacientes afectadas en las próximas semanas ni que profesionales sanitarios que coincidieron con el cirujano aporten información sobre comportamientos anómalos en quirófano.
Al menos una de las denunciantes accedió a la técnica propuesta por el médico de extracción de grasa de los muslos para su posterior inyección en los senos.
La instrucción judicial se centra ahora en recopilar testimonios y pruebas para esclarecer el alcance de los presuntos abusos y determinar si existió un patrón de conducta reiterado.
