Hoy comienza el juicio contra un abogado de Elche acusado de quedarse con 3.000 euros de una cliente que le había contratado para que llevara un procedimiento contra una clínica estética por mala praxis.
El 8 de julio de 2009, la perjudicada le dio 3.000 euros al procesado en concepto de provisión de fondos para que presentara una demanda contra la clínica.
Según la acusación pública, el letrado no presentó la demanda ni le devolvió el dinero a la perjudicada.
La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de los delitos de apropiación indebida y de deslealtad profesional y pide para él dos años de prisión y otros dos años de inhabilitación para el ejercicio de la abogacía.
