Agentes de la Policía Nacional han detenido en la localidad de Denia a un joven de 30 años acusado de cometer presuntamente dos delitos de robo con fuerza en escasas horas rompiendo el escaparate de los establecimientos, según ha informado la Comisaría provincial en un comunicado.
Los hechos sucedieron la madrugada del miércoles cuando una patrulla observó el cristal del escaparate de un establecimiento de telefonía totalmente fracturado y la alarma sonora encendida.
Los agentes dieron el aviso al resto de indicativos policiales para localizar al presunto autor. Mientras varias patrullas intentaban localizar al responsable, una llamada a la Sala Operativa del 091 de un ciudadano, indicaba a los agentes haber sido testigo de lo sucedido y aportó las características del presunto autor y dirección de huida.
Esta descripción permitió a los agentes localizar al presunto autor, quien presentaba una herida reciente en su mano derecha, probablemente fruto de la rotura del cristal del establecimiento, según las mismas fuentes.
Los agentes comprobaron que en el interior del establecimiento había un bloque de hormigón utilizado para separar las vallas metálicas de la vía pública, que al parecer fue el objeto utilizado para fracturar el cristal. Asimismo, encontraron una bolsa de lona con la que presumiblemente recogería los efectos sustraídos del interior.
Tras inspeccionar el interior del establecimiento, los agentes comprobaron que existía una zona cerrada con puerta metálica, que presentaba también diversos daños, aunque el presunto autor no llegó a fracturarla.
Tras su detención, los agentes descubrieron entre sus pertenencias un teléfono móvil que figuraba sustraído unos días antes en una tienda de telefonía de València con similar modus operandi.
ROBO EN EMPRESA DE TELEFONÍA
Escasas horas después de la detención, los agentes recibieron una denuncia del gerente de otra empresa de telefonía, en la que manifestaba haber sufrido un robo durante la madrugada en uno de sus establecimientos comerciales.
Los agentes revisaron las imágenes recogidas en las cámaras de seguridad del establecimiento y comprobaron que se trataba de la misma persona. Al parecer, el detenido escondió debajo de su vehículo un bloque de hormigón con el que más tarde rompió el escaparate del establecimiento.
En el registro practicado en su domicilio, los agentes intervinieron otro teléfono móvil que se encontraba sustraído de una tienda de telefonía de Valencia, donde los presuntos autores sustrajeron 11.000 euros, según las mismas fuentes.
El detenido, acusado de cometer presuntamente dos delitos de robo con fuerza, será puesto este viernes a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Dénia.
