Agentes de la Guardia Civil ha detenido en Elche un hombre español de 40 años acusado de quemar la casa del propietario del terreno que había ocupado, al que ya había amenazado con prender fuego a la vivienda con él y su familia dentro de si le echaban, según ha informado la Comandancia de Alicante.
Por estos hechos, se le imputa un delito de daños, por incendios en las tres viviendas que se vieron afectadas, un delito de amenazas y un delito de usurpación de vivienda. Se calcula que el valor de los daños oscila entre los 400.000 y los 500.000 euros.
A principios del mes de junio, en la pedanía ilicitana de la Marina, se produjo un incendio, que afectó tres casas prefabricadas, de las cuales dos quedaron totalmente calcinadas y la tercera sufrió graves daños.
A causa del estado de siniestro total en el cual quedaron dos de las viviendas, se necesitó el apoyo de los Especialistas en Incendios del Laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil de Valencia, para realizar un análisis más exhaustivo y obtener pruebas de cómo se inició este incendio.
Las primeras hipótesis apuntaron al hecho que había sido provocado y las investigaciones se centraron entonces en personas próximas a las víctimas, como podían ser familiares o vecinos, a los cuales fueron interrogando y tomando declaración.
Uno de los vecinos levantó las sospechas de los agentes puesto que vivía allí de forma ilegal, sin consentimiento de los propietarios y que, además, los amenazó varias veces con quemar la casa con ellos dentro de si intentaban echarle.
El informe de los especialistas confirmó la hipótesis que el fuego había sido provocado, iniciándose primero en una de las viviendas y propagándose después a las otros dos por radiación.
Una vez analizada toda la información, la Guardia Civil pudo concluir que el presunto autor de los hechos era el hombre español de 40 años que residía de forma ilegal en la parcela del lado. A él se le detuvo como el presunto autor de un delito de daños, un delito de amenazas y un delito de usurpación de vivienda. La valoración de los daños, todavía para determinar, oscila entre los 400.000 y los 500.000 euros.
El detenido quedó en libertad con cargos a la espera de juicio, después de prestar declaración, con la obligación de presentarse en los juzgados cuando sea requerido, según las mismas fuentes.
El Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Santa Pola ha sido el encargado de llevar a cabo la investigación, con el apoyo de los Especialistas de Incendios del Laboratorio de *Criminalística de la Guardia Civil de la Zona de Valencia.
