El presidente del PP, Pablo Casado, ha capitaneado la XXIV Interparlamentaria del Partido Popular celebrada en el Paraninfo de la Universidad de Alicante. El líder popular ha estado arropado por Cayetana Álvarez de Toledo, portavoz del PP en el Congreso, y por presidentes y presidentas autonómicos como Isabel Díaz Ayuso (Comunidad de Madrid), Alberto Núñez Feijóo (Galicia) y Juanma Moreno Bonilla (Andalucía), entre otros. Todos estos “pesos pesados” han intervenido en una “mesa redonda”. En cuanto al discurso de Casado, el presidente del PP lo ha centrado especialmente en la economía avisando de que “una nuevas crisis está a la vuelta de la esquina” y enfatizando en “la experiencia”, “la gestión”, “las recetas” y “los milagros económicos” del PP para remarcar que su partido es “el único” que la puede parar porque “no hay una salida de la crisis a la izquierda”.
En su vuelta a “su segunda casa” (Casado se define “medio alicantino”), el presidente del PP ha querido potenciar la “gran baza electoral” del su partido para el 10-N: la gestión económica. Casado lo ha hecho con un tono reivindicativo, pero moderado en el que ha apelado más a “la cabeza” más que “al corazón”. El líder palentino ha alertado de que una crisis económica se aproxima y que el propio Pedro Sánchez ha reconocido que será “incapaz de pararla”. Ante este contexto, Casado ha enfatizado que el PP es “la garantía” para combatir esa difícil situación económica y que ya la he demostrado dos veces con sus “recetas”: bajada de impuestos, rebaja fiscal y creación de empleo.
“El histórico debate entre Solbes y Pizarro de 2008” está aún muy presente en las filas populares y en la sociedad española. Casado ve similitudes con la situación actual y por esa razón les “ha pedido un esfuerzo” a sus dirigentes para que sepan explicar eficientemente y “no de un modo abstracto o macroeconómico” los riegos que supone que el PSOE gestione “el arranque” de una nueva crisis económica: “El PSOE negó la crisis deliberadamente”. Por ello, Casado aboga por crear un vínculo entre “política económica y política social”.
Confrontando a “la calidad democrática” y “el cinturón de seguridad”
Casado ha rememorado dos frases emblemáticas del PSOE, “España no se merece un gobierno que nos mienta” (Rubalcaba después del 11-M) y “calidad democrática” para confrontarlas con “la exitosa política económica” del PP: “España no merece un Gobierno que nos mienta con la crisis económica y sus repercusiones sociales. La última vez que llegó una crisis económica con el PSOE en el Gobierno nos costó 3 millones de empleos, la congelación de las pensiones y el recorte del sueldo de los funcionarios”.
El presidente popular ha criticado duramente “la irresponsable” política de Pedro Sánchez, especialmente en la economía: “El cheque en blanco que promete en campaña es un cheque sin fondos y las cuentas que presenta ya le he dicho desde Bruselas que no cuadran”. Siguiendo en la misma línea, Casado afirma que “nunca hemos estado tan lejos para afrontar una crisis como lo estamos ahora” por “ese irresponsable que tenemos en el timón” y por “la fragmentación y enfrentamiento político que atraviesa España”.
Aunque no ha hablado literalmente de la exhumación de Franco, Casado le ha lanzado un dardo sutil a “su calidad democrática” (frase pronunciada tras lograr la exhumación): “La calidad democrática es que los jóvenes se sientan de su país y amparados por él. Si terminas tus estudios y no hay oportunidades, se crea desafección y con ella se resienta la democracia”.
Finalmente, Casado cerró su capítulo económico haciendo este contundente alegato: “No hay salida de izquierdas a la crisis ni hay salida de España con Pedro Sánchez. Hay que poner el cinturón de seguridad a la sociedad española, y ese cinturón es el Partido Popular, es el centro reformista, es el europeísmo activo y es la concordia social para cerrar las fracturas territoriales, sociales y generacionales que padecemos y que la crisis agravará si no hacemos todo lo que habría que estar haciendo ya”.
“La ambición personal de Sánchez tiene de rehén a España”
Pablo Casado ha reprochado a Pedro Sánchez “el uso electoralista” que está intentando sacar con la exhumación de Franco y los independentistas. Ha englobado este uso en “una agenda de división” con “temas artificiales que poco importan a la gente” (referido a la exhumación de Franco). El presidente del PP subió su tono de crítica y afirmó rotundamente que “la sociedad española hoy permanece rehén de la ambición personal de Pedro Sánchez. Todas esas personas que he nombrado hasta sumar 47 millones,
somos rehenes de su agenda personal. Es lo suyo frente a lo de todos”.
Frente a esa “agenda de división”, Casado propone “una agenda en positivo y reformista” en la que se debata de temas que “de verdad importan y unan a los españoles”. En ese sentido, ha hecho especial hincapié a la viabilidad del Estado del Bienestar y a la creación de empleo.
Aunque no habló directamente de la situación de Cataluña, Casado le afeó rotundamente a Pedro Sánchez “la peligrosa amistad” que tiene con sus “socios”: “Los partidos nacionalistas que han suscrito el manifiesto a favor de la autodeterminación de Cataluña son los socios y aliados de Pedro Sánchez, entre los que se encuentran los que le apoyaron en la moción de censura contra Mariano Rajoy”. El líder popular censuró en esa foto y alabó la foto con “las personas que necesita España (políticos del PP): “Me identificó mucho más con Feijóo que con Otegui, me identificó mucho más con Juanma Moreno que con Junqueras y me identificó mucho más que con Torra”.
Finalmente, Casado terminó su discurso prometiendo a los españoles que el PP “no os va defraudar” y pidiendo su voto ” unido alrededor de una agenda de libertad” con la que ha logrado “grandes éxitos como país”.
Cayetana apela a “un rearme firme” del Estado para combatir al nacionalismo
La portavoz del PP en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, profundizó sobre la situación de Cataluña. La dirigente popular “retrató al “pacifismo nacionalista” destacando que en “el nacionalismo siempre hay un elemento de violencia estructural, de agresión al otro porque no hay nada más violento que querer convertir al vecino en un extranjero y eso ha pasado en Cataluña. A continuación, una vez “quitada la máscara” del nacionalismo catalán, puso especial énfasis en determinar el plan de acción: “Os pido un rearme de gobierno y rearme de Estado, no solamente un rearme temporal del constitucionalismo sino que ese rearme vaya acompañado de una estrategia clara constitucionalista desde el Estado para todo el territorio nacional”.
Álvarez de Toledo resaltó dos elementos esenciales: convicciones y principios firmes, y un plan de acción. Siguiendo la misma línea, puso en valor “tener principios” aunque a veces resulte “incomodo” o difíciles”. Combatió “la bondad” de la palabra diálogo: “Es de las palabras más bonitas y tergiversadas del diccionario español. Cuando nos dicen dialoguen, nos dicen cedan. El diálogo es a costa de la democracia”. En ese sentido, la portavoz popular defendió “un diálogo con los constitucionalitas, demócratas y con los que de verdad defienden la libertad y la igualdad de todos”. En cuanto al plan de acción, demandó “convertir al constitucionalismo en una política de más Estado”.
Finalmente, le envió “un recado” a Santiago Abascal, criticándole que planteara “postergar las elecciones” por el conflicto de Cataluña: “Es exactamente al revés, esta crisis nos ha hecho un regalo, nos ha regalado la oportunidad de acabar con ese gobierno y con una etapa aciaga y lo vemos con esperanza porque tenemos la mejor y única alternativa que es Pablo Casado”. Cayetana acabó con un alegato emotivo: “Depende de nosotros, depende de nuestro coraje constitucional, hagámoslo por nosotros, por el conjunto de españoles y por ese policía (herido en la UCI tras la violencia en Barcelona) que se jugó la vida por nuestra libertad y por nuestra igualdad para que nosotros podamos seguir siendo españoles”.
Ayuso afea a Sánchez que “se ponga bravo” con Madrid y “muy manso” con Torra
Una de las máximas expectaciones de esta interparlamentaria del PP era la participación de Isabel Díaz Ayuso. La presidenta de la Comunidad de Madrid se detuvo ante la prensa y repasó los temas más candentes de la política española. Sobre Cataluña, señaló que “se está viviendo una situación dramática”. Además, indicó que con “este Golpe de Estado hay soterrada una división social entre amigos en una situación de inseguridad ciudadana”. Por eso, apostó “trasladar, desde otras comunidades autónomas, nuestro apoyo a la sociedad civil catalana, estar de su lado, poner de nuestra parte todas las iniciativas para que la sociedad siga avanzando y tender la mano para que nuestras empresas compitan en el exterior y restaurar la convivencia”.
Siguiendo con la situación de Cataluña, Ayuso le reprochó a Pedro Sánchez “ponerse muy bravo con las autonomías como Madrid pero muy manos con Torra y con esos políticos que están fomentando esa división y ayer vimos como parte de sus amigos ya están en esa plataforma de la ignominia, un plataforma donde están todos aquellos políticos y esos movimientos que quieren desestabilizar España.
Por otra parte, ante las acusaciones de “política desleal” por parte del Consell de Ximo Puig, la presidenta popular fue tajante: “Los políticos de la Comunidad Valenciana pueden tomar de lo que hacemos en Madrid y verán como bajando impuestos 16 años de manera interrumpida y dando más libertad a los ciudadanos por arte de magia se crea empleo”.
Finalmente, Diario de Alicante le preguntó a Isabel Díaz Ayuso si podría cumplir su promesa de “lograr una gran bajada de impuestos” en la Comunidad de Madrid por “los impedimentos” que está poniendo el Gobierno de Pedro Sánchez a las autonomías del PP a la hora de seguir esa política económica. La presidenta madrileña confirmó que su gobierno “no va a subir los impuestos bajo ninguna circunstancia”. Del mismo modo, ha dejado claro que la postura que tiene jefe del ejecutivo central hacia Madrid no es nada positiva: ” Pedro Sánchez en vez de contribuir con Madrid, quiere ir contra sus intereses para echarnos un pulso como ya hizo Zapatero en su día”.
No obstante y a pesar de “las trabas” del gobierno socialista, Ayuso confirmó que su ejecutivo “seguirá blindándose con sus políticas” y anunció que “van a proponer iniciativas legislativas para evitar que Pedro Sánchez ataque a aquellas comunidades (como la Comunidad de Madrid) que son leales con el marco autonómico y solidarias en una contribución común”. Por último, incidió en que su gobierno va a “buscar alternativas” y recalcó que “no va a subir impuestos porque es lo que hace que vengan más empresas y que se traiga inversión”.
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