Representantes de asociaciones de vecinos del Distrito 2 de Alicante y miembros del Comité de Empresa de Masatusa han mantenido en la tarde de ayer lunes una nueva reunión, la tercera, después de que la UTE concesionaria del servicio de autobuses de la ciudad, Vectalia MIA, propusiera al Ayuntamiento la reducción de un autobús en cada una de seis líneas.
A la espera de que los técnicos municipales evalúen si el descenso de usuarios esgrimido por la adjudicataria y la ampliación de las frecuencias que han propuesto se ajustan al contrato de servicio, vecinos y trabajadores siguen dando pasos para estrechar lazos.
Así, los asistentes a la reunión han intercambiado información y las entidades vecinales han acordado «mantenerse vigilantes ante posibles intentos futuros de deteriorar el servicio publico del transporte urbano, tratando de fortalecer el entendimiento y apoyo mutuo entre ambos colectivos en beneficio del interés general».
Las asociaciones del Distrito 2 han hecho un llamamiento al conjunto de asociaciones de la ciudad para contactar con el Comité de Empresa al objeto de «unir esfuerzos que redunden en beneficio de todos».
Los cambios supondrían la supresión de un autobús diario en cada una de las líneas 3, 6, 8, 10 y de lunes a viernes en la 1 y la 14. Fuentes municipales advertían hace nueve días que hay que tener en cuenta que el contrato actual admite la adaptación dinámica de dichas frecuencias en función de la demanda, pero siempre dentro de los límites del documento”.
Desde la oposición y el propio Comité de Empresa han recordado que las últimas cifras globales de pasajeros de 2024 anunciadas en febrero apuntaban a una cifra «récord» de 23,5 millones de usuarios de autobús en 2024.
Por su parte, y según explicaba el propio Ayuntamiento, Vectalia MIA justificaba la supresión de los autobuses «ante la caída de viajeros que se está observando en la gráfica de evolución de los usuarios desde noviembre de 2024, y que ha llegado a suponer en febrero de 2025 una caída del 6,4% respecto al año anterior, unido al descenso del 55% en la saturación en los vehículos que no aceptan más pasaje», lo que «hace necesario ajustar provisionalmente las frecuencias».
