El rector de la Universidad Miguel Hernández, Juan José Ruiz Martínez, y el decano de la Facultad de Medicina, Antonio Compañ, muestran su “total disconformidad” con la decisión de la Generalitat de implantar nuevamente el Grado de Medicina en la Universidad de Alicante, donde estuvo hasta 1996. Señalan en un comunicado conjunto de cuatro puntos que es una decisión política y que “va en contra del criterio científico y profesional expresado reiteradamente en los últimos años por las organizaciones profesionales, entidades educativas y sanitarias como la Conferencia Nacional de Decanos de Facultades de Medicina Españolas, el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina, el Foro de la Profesión Médica, la Organización Médica Colegial o el Sindicato Médico CESM”.
Añaden que la decisión de Puig es tan arbitraria como la que en su día tomó Eduardo Zaplana cuando retiró esta titulación del campus de San Vicente para ponerlo en manos de la recién creada UMH. La UMH recuerda que España es el segundo país del mundo con más facultades de Medicina y que “en marzo de este año 1.161 médicos del país se encontraban en paro y que en los últimos años se está incrementando exponencialmente el número de médicos que tienen que emigrar, lo cual supone una lamentable pérdida de recursos humanos y de inversión pública”.
Los responsables de la institución manifiestan que pese al paro y a la fuga de médicos, la pasada semana ofrecieron a la Generalitat ampliar 80 plazas en la UMH. Y ayer mismó anunció la creación de la nueva facultad en Sant Vicent del Raspeig “a tan solo 10 kilómetros de Sant Joan d’Alacant, donde se encuentra la Facultad de Medicina desde hace más de 40 años”. Y sostienen que la nota de corte en la Miguel Hernández es más baja que en a Universidad de Valencia por lo que es más fácil que los alicantinos puedan estudiar cerca de sus domicilios.
Critican también que la decisión lleva implícita una gestión ineficiente de recursos. “El mantenimiento de una Facultad de Medicina se puede estimar en unos 20 millones de euros al año y, por el contrario, el aumento de 80 alumnos en la UMH supondría cerca de medio millón de euros. Por tanto, entendemos que esta medida afecta muy seriamente al tan esperado Plan de Financiación de las universidades”. Y consideran que esta medida desprovee de sentido el Mapa de Titulaciones universitarias.
En un tercer punto exigen que se garantice a los alumnos que puedan cursar sus prácticas con calidad y que informe previamente dónde y en qué condiciones las van a realizar. “Creemos que no tiene sentido dividir los recursos materiales y humanos de los que dispone esta provincia”.
Por último manifiestan su compromiso con estudiantes, profesores, profesionales sanitarios y con la ciudadanía para mantener la calidad de la enseñanza de Medicina de la provincia a pesar de los “obstáculos”.
