La economía española desaceleró su crecimiento trimestral más de un punto entre julio y septiembre, hasta el 0,2%, frente al 1,5% del trimestre anterior.
Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la desaceleración es a causa, sobre todo, de la moderación en el avance de la inversión y del consumo de los hogares.
De hecho, se estima que el consumo de los hogares ha aumentado en el tercer trimestre un 1,1%, una décima menos que en el trimestre anterior, mientras que el consumo de las instituciones sin fines de lucro ha caído un 0,2%, frente al crecimiento del 0,5% del trimestre anterior. El gasto público ha aumentado un 0,6% entre julio y septiembre.
Sin embargo, la inversión ha frenado su crecimiento trimestral casi dos puntos, desde el 2,5% del segundo trimestre al 0,6% en el tercero. El crecimiento interanual del PIB se ha moderado tres puntos en el tercer trimestre, desde el 6,8% al 3%, a consecuencia de una menor aportación tanto del sector exterior como de la demanda nacional.
El PIB del tercer trimestre se situó en 328.764 millones de euros, nuevo máximo histórico. Son casi 5.000 millones de euros más que en el trimestre anterior y 23.237 millones de euros más que en el tercer trimestre de 2021.
