Agentes de la Policía Nacional han detenido en Elche a cuatro personas, tres hombres y una mujer de entre 18 y 54 años, acusados de sustraer casi 1.000 euros en ropa y complementos de diferentes tiendas de un centro comercial.
Según ha informado este cuerpo de seguridad en un comunicado, los agentes estaban realizando un control en el marco del Plan Comercio Seguro a la salida de este centro comercial cuando observaron que los ocupantes de un vehículo se comportaban al verlos de manera alterada y nerviosa, al tiempo que ocultaban algo debajo de los asientos.
Tras dar el alto al vehículo pudieron descubrir qué eran los objetos ocultos debajo de los asientos: alarmas de las que se utilizan en las tiendas de ropa para evitar el hurto de las prendas. En el maletero del coche además había una gran cantidad de ropa de diferentes establecimientos.
Los agentes se personaron en las tiendas y los encargados les pudieron corroborar que las prendas acababan de ser robadas. En las grabaciones de las cámaras de seguridad quedó reflejada la forma de actuar del grupo.
El modus operandi era siempre el mismo: la mujer y el más joven de los integrantes del grupo accedían al local y actuaban como madre e hijo. Cogían prendas que luego metían en el probador, donde desactivaban las alarmas, para luego sacarlas de la tienda en una bolsa que una vez fuera entregaban a los otros dos componentes del grupo.
De esta forma consiguieron obtener un botín de casi 1.000 euros en un par de horas. Los detenidos que residían fuera de la localidad de Elche, se habían desplazado hasta allí para este fin y, al parecer, tenían intención de acudir a otras localidades para continuar con sus actuaciones. El conductor del vehículo carecía de carné de conducir, por lo que también le fue imputado un delito contra la seguridad del tráfico.
Todas la prendas recuperadas fueron entregadas a sus legítimos propietarios y los arrestados, de nacionalidad española y marroquí, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Elche.
