El Ministerio de Sanidad ha detallado este jueves tras el Consejo de Ministros extraordinario la nueva normativa sobre el uso de la mascarilla. A partir de este sábado, 26 de junio, no será obligatorio el uso de la mascarilla en exteriores “siempre que se respete la distancia de seguridad de 1,5 metros”.
Además, Sanidad ha recomendado que se lleve una mascarilla “en el bolsillo” por sí se encuentran en situaciones de aglomeraciones o donde no se pueda respetar la distancia, y porque será necesaria para el interior de comercios y negocios.
Por tanto, tras el “buen ritmo” de vacunación con más de 15 millones con pauta completa y la mejora de la situación epidemiológica, el Gobierno ha adoptado la flexibilidad de las mascarillas. La normativa queda así:
No será obligatorio llevar mascarilla en el exterior si se puede mantener la distancia de seguridad marcada por las autoridades sanitarias de un 1,5 metros. Las persona convivientes no tendrán que guardar la distancia marcada.
Tampoco será obligatoria en la piscina o la playa, donde hasta ahora sí que era necesario utilizarla con excepción del baño y mientras se tomaba el sol con la distancia pertinente.
Seguirá siendo obligatoria el uso de la mascarilla en lugares cerrados como bares y restaurantes, bibliotecas, comercios y establecimientos, y en el transporte público tanto en aviones, autobús, metro como ferrocarriles a excepción de los barcos, en la cubierta y el camarote.
Conciertos y residencias
Asimismo, el Gobierno flexibiliza la normativa en espectáculos y permitirá quitarse la mascarilla en conciertos, si son sentados y se puede mantener la distancia interpersonal de seguridad de 1,5 metros. Sin embargo, sí que será obligatoria cuando en los conciertos se esté de pie.
En las residencia de mayores y centros de diversidad funcional dejará de ser obligatoria en aquellas en que el 80 % de los residentes tengan la vacuna completa. Sí que será obligatoria para los trabajadores y para las visitas.
Además, en las dependencias destinadas a trabajadores esenciales como los efectivos de bomberos, podrán dejar de usar la mascarilla sí al menos hay un 80 % de vacunados.
