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jueves, 25 abril 2024

Juicio a un marinero de la Armada Española acusado de violar a una compañera en Alicante

Esta mañana ha empezado el juicio en la Sección Primera de la Audiencia ante el marinero de la Armada Española acusado de violar a una compañera del buque "Contramaestre Casado" mientras estaba atracado en el puerto de Alicante.

Esta mañana ha empezado el juicio en la Sección Primera de la Audiencia ante el marinero de la Armada Española acusado de violar a una compañera del buque “Contramaestre Casado” mientras estaba atracado en el puerto de Alicante.

Los hechos se produjeron en el año 2014, cuando el marinero de la Armada se encontraba en el buque de transporte ligero atracado en el puerto de Alicante con motivo de la salida de la prueba internacional de vela Volvo Ocean Race.

El acusado, que se encuentra en libertad provisional, ha llegado esta mañana sobre las 10 horas a la Audiencia Provincial para la vista de jurisdicción ordinaria (no militar) en la que Fiscalía pide siete años de prisión por estos hechos.

Al marinero sospechoso, Víctor Enrique L.A., se le ha acusado por la Fiscalía de un delito de agresión sexual por el que se pide siete años de prisión, así como diez años de alejamiento respecto de la víctima y siete años más de libertad vigilada, mientras que la acusación particular eleva a 10 años la petición de cárcel y a 15 la prohibición de acercarse a la víctima.

La Fiscalía sostiene que el marinero acusado de violación se introdujo sobre las cinco de la madrugada en la cubierta de la parte femenina de la nave “con el deseo de mantener relaciones sexuales”.

La víctima se encontraba durmiendo en una litera, en ropa interior cuando el presunto violador abordó por sorpresa y la inmovilizó colocándole el antebrazo derecho sobre el pecho. A continuación, siempre según el escrito del Ministerio Público, acercó sus genitales hasta los de la mujer y, “sin su consentimiento, la penetró vaginalmente”, al tiempo que la besaba.

Como consecuencia de la presunta violación, sufrió un trastorno de adaptación por el que ha necesitado tratamiento psiquiátrico durante un año, aunque no padece secuelas posteriores a la violación.