La grúa municipal se ha llevado el coche del obispo de Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla, junto al monasterio alicantino que custodia la reliquia de la Santa Faz, a donde este jueves han peregrinado más de 350.000 personas en esta popular romería que desde hace 536 años se repite el segundo jueves después de Semana Santa.
El incidente ocurrió en la víspera de la peregrinación, este miércoles, después de que el obispo aparcara su vehículo correctamente junto al caserón del monasterio dentro de los preparativos para la peregrinación de hoy, donde la multitud camina en romería para venerar uno de los paños con los que, según la tradición cristiana, la Verónica secó el rostro de Cristo en su camino al monte Calvario.
Preguntado este jueves por EFE al término de la misa por la Santa Faz, el obispo ha explicado que la retirada de su coche se debió a que, dentro de las actuaciones del ayuntamiento para la señalización de la romería, operarios municipales pintaron la zona donde estaba «bien estacionado» junto al monasterio de Santa Faz y se llevaron el vehículo.
Sin multa para el obispo
Tras la sorpresa y susto inicial, se enteró de lo sucedido para poder recuperar el coche, sin sanción económica alguna.
«No me han multado y me han pedido disculpas», ha recalcado Munilla, quien ve lo ocurrido como una «anécdota». «Que cosas como esta tengan que ser noticia quiere decir que no tenemos muchos problemas, y es buena señal», ha comentado.
No ha sido el único incidente con un coche en los últimos años de Munilla ya que en marzo de 2020, en pleno confinamiento por la covid-19 y cuando era obispo de San Sebastián, fue multado con 600 euros por la Guardia Urbana de la capital donostiarra por circular en un vehículo con un acompañante en el asiento delantero, lo que infringía en ese momento las normas del estado de alerta decretado para combatir la expansión del virus.


