Los médicos de España han iniciado esta semana una huelga de cuatro días, del 9 al 12 de diciembre, en rechazo al borrador del nuevo Estatuto Marco del personal sanitario. Las organizaciones convocantes, CESM y SMA, han señalado que el documento no garantiza un marco profesional adecuado y han reclamado una negociación propia para el colectivo. Los territorios han fijado servicios mínimos ante el incremento de la demanda asistencial por virus respiratorios.
Entre las peticiones figuran una regulación específica de las guardias, el reconocimiento en la carrera profesional de las titulaciones MECES II y MECES III, la revisión de la movilidad forzosa y mejoras que permitan retener a los profesionales. Las asociaciones médicas han advertido de que la falta de avances podría prolongar el conflicto más allá de esta semana.
Demandas y contexto
El sector insiste en que las guardias deben considerarse actividad extraordinaria, con retribución diferenciada y efectos en la jubilación. Reclaman también una clasificación profesional acorde con la especialización del colectivo y garantías frente a traslados obligados dentro del Sistema Nacional de Salud.
Adhesión en varios territorios
La convocatoria se ha extendido a comunidades como la Comunitat Valenciana, La Rioja y el País Vasco, donde facultativos de distintos ámbitos han secundado los paros. La movilización coincide con un incremento de casos de gripe y otras infecciones respiratorias, lo que ha llevado a reforzar la atención en urgencias y áreas críticas.
