La 47ª Noche de la Economía Alicantina, uno de los eventos empresariales más importantes del año, se convirtió ayer al menos durante unos minutos en la Noche de los Despropósitos económicos para Alicante. Fue durante el dicurso del anfitrión Carlos Baño, presidente de la Cámara de Comercio de Alicante.
Las palabras de Baño no fueron paños calientes porque como él mismo recordó anoche ya advirtió cuando fue elegido presidente hace menos de medio año que es “peleón y reivindicativo”. Y así, ante el mismo president Ximo Puig y varios conselleres recriminó la actitud del Govern en su participación en la reciente aprobación del Plan Hidrológico del Tajo en el que la Generalitat votó con abstenciones a unos previsibles recortes de agua para el Levante.
“En el agua no puede haber vencedores ni vencidos, sólo respeto e igualdad entre españoles. Hace falta un pacto de Estado, pero, señor President, hay que pelearlo”.
También tuvo palabras para la tasa turística. “President, ¿por qué una tasa turística que nadie quiere?”, espetó a Ximo Puig, subrayando que “la política turística, al menos en esta provincia, ha sido siempre ejemplo de pacto de Estado”.
El traslado de la cabecera del AVE a Chamartín, una “decisión impuesta” o la infrafinanciación de los Presupuesto Generales del Estado en Alicante, son para el responsable empresarial muestras del abandono “secular” de la provincia porque “hace mucho tiempo, ya demasiado, que Alicante no está en la agenda política de ningún gobierno de la nación”.
La financiación estatal a costes del programa del IMSERSO, el conflicto con Argelia y su incidencia en la exportación de la provincia, la pérdida de casi 10.000 millones de euros de crédito al sector privado o la pérdida de 12 puntos de poder adquisitivo de la población alicantina desde el año 2000 desde 2018 colmaron también las palabras de Carlos Baño. Y a pie de calle, “los cierres diarios de pequeños negocios, o cómo se ha disparado el número de concursos de acreedores, por encima del 30% tanto a nivel nacional como en nuestra provincia”.
Con este escenario, el presidente de Cámara Alicante, se dirigió a los miembros del Govern valenciano . “Queremos un gobierno de la Generalitat Valenciana, del color que sea, pero que sea más próximo y más cercano a los intereses de las empresas alicantinas. De nada nos sirve un gobierno que se manifieste contra los presupuestos, lo que necesitamos es un gobierno que ejerza su influencia, que es mucha, para no tener que manifestarse”.
