Aludium, una de las principales plantas españolas de láminas y bobinas de aluminio, presenta este jueves 15 de septiembre su nueva laminadora, tras el incendio que en la madrugada del 3 de abril de 2021 arruinó el anterior sistema de laminación, el que permite la transformación del 100% del material que entra en la empresa. Gracias a un trabajo en el que ha sido vital la colaboración con Siemens, para construir una nueva maquinaria que le ha permitido aumentar un 10% la producción y reducir un 12% la emisión de CO2.
Los hechos que hoy ha relatado el director de la planta alicantina de Aludium, José Ignacio Juan, hablan de una reactivación de la maquinaria en tiempo récord y en plena crisis por la falta de chips y componentes electrónicos en el que la división española de la multinacional Siemens tuvo gran cometido.
También requirió que una veintena de trabajadores se desplazara de Alicante a Badajoz y el País Vasco para trabajar con dos laminadoras y para el que requirió también la modificación de cientos de procesos de trabajo en breve tiempo. Este esfuerzo colectivo de personal y empresa supuso que a finales del mismo mes se comenzara a recibir aluminio y en 7 semanas la planta estuviera al 90% de su capacidad.
A principios de este mes se ha puesto en marcha la nueva laminadora con la que se prevé producir en torno a 70.000 toneladas este año y una cantidad que se prevé similar para 2023 debido a la incertidumbre económica. Las ventas estimadas pra este año son de 200 millones de euros en Alicante. La planta alicantina tiene una producción diversificada para distintos sectores pero en mayor volumen produce chapas de aluminio para la construcción y envases para las industrias cosmética y alimentaria. Es líder mundial en tapones de rosca para bebidas.
En un acto celebrado a mediodía, con la presencia del alcalde, partners y plantilla ha querido premiar a la plantilla por su cooperación en reactivar la empresa y también al cuerpo de bomberos de Alicante por el gran esfuerzo que realizó para contener el incendio en un área reducida de la planta.
El fuego se produjo por causas desconocidas cerca de un depósito con 60 toneladas de parafina, similar al queroseno. Según explicaba el director de la planta, los bomberos alicantinos destacaban que “pocas veces se habían enfrentado a un poder de combustión como ese” y se tuvieron que limitar a contener un área lo mas pequeña posible y proteger el resto de equipo de la compañía.
La reparación de los daños causados por el incendio han obligado a invertir 12,5 millones de euros en la planta, 11 al equipo principal. El nuevo laminador es capaz de producir 6.000 toneladas más al año.
“De no haber puesto en marcha los planes de contingencia se podrían haber perdido más de 70.000 toneladas de producción que podrían haber supuesto unos 60 millones de euros de pérdida de negocio“, ha destacado José Ignacio Juan.
