El Ayuntamiento de Guardamar del Segura ha reabierto al baño la playa de Vivers esta mañana después de mantenerla cerrada durante unas horas, desde ayer por la tarde, por la aparición de dos ejemplares de Glaucus atlanticus, conocidos como dragones azules.
La medida se adoptó de forma preventiva tras la alerta de la Policía Local, que recomendó extremar precauciones ante esta especie marina capaz de causar picaduras dolorosas y síntomas como mareos, náuseas o vómitos. Aunque no se han detectado nuevos ejemplares, socorristas y agentes continúan con la vigilancia en la zona.
En paralelo, un tercer dragón azul ha sido localizado este jueves en la playa de La Mata, en Torrevieja, lo que ha llevado a reforzar los protocolos de control en toda la Vega Baja y a insistir en que los bañistas eviten cualquier contacto directo con esta especie venenosa.


