Decenas de trabajadores de la limpieza municipal de Alicante se han concentrado a las puertas del Ayuntamiento este jueves para reclamar mejoras laborales y salariales en el nuevo convenio laboral. Los empleados llevan sin contrata vigente desde el inicio de la prestación del servicio público en Alicante. Después de dos meses desde que se han roto las conversaciones con la UTE Netial, concesionaria de recogida de residuos sólidos urbanos, el Comité de Empresa llama la atención pública a golpe de claxon, silbato, megáfono y consignas voceadas.
Requieren la mediación municipal, que por el momento no se ha producido, pero sostienen que siguen adelante con todos los frentes, también el judicial y una huelga que afecta a los días previos de Hogueras y a la misma nit de la cremà.
«Ellos tienen que llegar a un acuerdo con nosotros tarde o temprano. El Ayuntamiento si quiere que nos ayude y si no quiere ayudarnos, nosotros seguiremos la marcha», asevera rotundo el presidente del Comité de Empresa de Netial, Francisco Lombardo.
Desde el Comité sostienen que tenían los acuerdos ya preparados para la definición e implementación de las especialidades, categorías, trabajos de fines de semana y festivos: «Hasta las prendas de trabajo que iban a ser de mejor calidad», relata. Un desacuerdo por la subida salarial ha dado al traste con las negociaciones.
«Nos lo dio como si fuera un ultimátum. O cogéis esto o ya no hay nada, explica Miguel Montesinos, del Sindicato de Saneamiento Urbano de Alicante (SSUA). El Comité tras celebrar una asamblea con casi 350 trabajadores, realizó un referéndum «con bastante afluencia» que rechazó las condiciones de subidas salariales.
«A raíz de eso ya se paralizó todo y la empresa, de hecho, la ropa que estaba haciendo ya estaba ya para firmar y se tiró para atrás porque no había salido el sí», añade Miguel.
Los sindicados que conforman el Comité de Empresa han presentado en las últimas semanas diferentes demandas judiciales para reclamar todas las cuestiones que consideran que se están vulnerando.
‘Años conduciendo vehículos sin especialidad reconocida’
Los sindicatos exigen que se regularicen las categorías profesionales. Afirman que los trabajadores llevan años conduciendo vehículos que tienen la especialidad de carga lateral y la empresa no la quiere reconocer y no lo retribuye adecuadamente.
«Hay gente que está conduciendo y en vez de ponerlo de conductor o de peón conductor, lo tienen de peón», explica Francisco. «Y hay que regularizar a un señor que esté haciendo una carga lateral, por ejemplo, que le pongan de carga lateral y hay que regularizar un servicio del señor que va en un carrito y quiere promocionar a conductor y no lo dejan promocionar».
A este respecto, informan que la empresa lleva dos años sin convocar plazas de promoción interna. «Decide que se trae a la gente de fuera ya con categorías y especialidades. No lo estamos entendiendo».
Por su parte, y por citar otras de las actuales carencias, hay que destacar que existe una sobrecarga excesiva en los peones conductores de adecuación de contenedores, que están recogiendo 130 y 160 contendores en las rutas cuando el pliego de condiciones establece que deben ser 110.
Sin convenio desde que comenzó a prestar el servicio municipal y la contrata podría peligrar
Desde la Presidencia del Comité de Empresa, ocupada por CSIF, se destaca que esta medida «ha sido inevitable debido a la actitud de Netial a la hora de negociar con los trabajadores diferentes aspectos que ha ido incumpliendo de forma sistemática».
De este modo, cuando en el año 2023 Netial accedió a la contrata de este servicio pidió tiempo a los trabajadores «para regularizar toda la situación heredada que se arrastraba de la anterior concesionaria». Sin embargo, exponen que «ese tiempo no fue utilizado para llevar a cabo tal regularización».
Junto a ello, y tras quince meses de negociación del nuevo convenio colectivo, no hay forma de llegar a un acuerdo con la empresa, «la cual ha adquirido la estrategia de decir a todo que sí para al día siguiente decir lo contrario, pretendiendo que los trabajadores acepten un todo incluido en lo referente a la subida salarial de un 1% sin atrasos, que de no asumirse afecta a mejoras en aspectos tales como promoción, especialidades, fines de semana»…
Ante ello, el Comité de Empresa afirma que se sienten «chantajeados por la empresa». Denuncian que después de recibir la convocatoria de huelga «está tomando represalias a modo de sanciones a los trabajadores».
En los últimos 10 años la única subida salarial que han tenido los trabajadores ha sido de un 1,2% un año, 1,2% otro año y de 0,60 céntimos al día los barrenderos, «cantidad esta última que incluso tiene que ser reclamada porque en ocasiones no se les paga. Es necesario y reivindicamos subidas salarias ajustadas al IPC», reivindican.
Desde el Comité de Empresa de Netial se quiere llamar la atención también sobre el hecho de que se incumplen los correturnos, «los cuales se van perdiendo porque no se amortizan ni sustituyen. Incluso se están incumpliendo puntos del actual pliego de condiciones que podrían derivar en la anulación de la contrata».
Insuficiente plantilla para Alicante
Miguel Montesinos, explica además las trabas de la limpieza municipal en Alicante. Empezando por una plantilla que consideran insuficiente. «Bilbao tiene aproximdamente 348.000 habitantes y Alicante 358.000. Allí la ciudad cuenta con una plantilla de 800 a 900 trabajadores y nosotros somos 400 y pico».
Huelga de limpieza en Alicante para Hogueras
Como ya se ha hecho público, el Comité de Empresa ha anunciado huelga los días 16 y 17 de junio, que será indefinida a partir de las 12 de la noche del 25 de junio, en plena nit de la cremà. Esto será en el caso de que no se alcance un acuerdo para cerrar el convenio colectivo antes.
El presidente del Comité de Empresa señala que han «respetado los días grandes, porque la gente lleva un año entero ahorrando, intentando pasárselo bien». Sin embargo en la noche en que los monumentos ardan «la recogida de residuos se hará con lo que nos marque la ley. Si la ley nos marca un 50, un 50, si nos marca un 30, un 30. No va a salir nadie más». Queda la opción de que barran las calles personal externo, de refuerzo, que contrata la empresa habitualmente en Fiestas.
«A lo mejor no pueden salir, puede ser», concluye Lombardo quien insiste en lograr esa «cooperación, tanto del Ayuntamiento como de la empresa. Y volver a sentarnos a una mesa de negociación, pero con buena fe por parte de todo el mundo».
