La provincia de Alicante cuenta con un uno de los mayores centros residenciales de personas con autismo de la Comunidad Valenciana, el Centro Infanta Leonor . Más de un centenar de profesionales atienden diariamente a unos 50 residentes. Y ahora, en estos días de confinamiento, la realidad, ya difícil y compleja de entender para estos pacientes, resulta aún más complicada de gestionar, tanto por la falta de recursos preventivos como por las características de los usuarios.
“Cuando nos ven con mascarillas, nos las arrancan por que no entienden porqué vamos así”. Lo cuenta, Tania Lafuente, desde la Asociación de Padres Autismo Comunidad Valenciana, como directora de este centro. Mientras también denuncia la ausencia total de material de prevención y la extrema dificultad para contactar con las administraciones responsables y poderles trasmititr la situación.
“¡No tenemos material!, aquí lo único que nos llegó fui al inicio de todo seis garrafas de hidrogel ¡pero nada más! -explica Lafuente- “Además, contactar con los responsables de la administración está siendo imposible. Estoy harta de enviar correos que no me contestan para explicarles cómo estamos porque a estos centros, en la gestión de esta situación se nos tiene abandonados”, añade.
De hecho, cabe recordar las especiales características que presentan estas personas y que entre las mismas excepciones para la libre circulación que establece el estado de alarma ya se contempló la excepción en personas con autismo o caràcter disruptivo por las consecuencias negativas que podia ocasionarles su confinamiendo debido a su ralación con el entorno.
“Esto no es una residencia de personas mayores donde puedas tener a los pacientes en su habitación, Aquí son activos y necesitan moverse”
“Hay que tener en cuenta que si estos residentes ya presentan dificultades para entender y relacionarse con su entorno, ahora, cuando nos ven a los trabajadores con mascarillas, no lo entienden y nos las arrancan, se asustan. Además esto no es como las residencias de personas mayores en las que cuando hay casos puedes mantener a un residente aislado en su habitación. Aquí físicamente están bien, tienen movilidad, necesitan seguir con su rutina y esto parece que nadie lo está teniendo muy en cuenta”, se lamentan desde la dirección.
Con todo, en este 2 de abril, día internacional dedicado a las personas con autismo, Diario de Alicante quiere poner de manifiesto la ‘invisibilidad’ de es trastorno en la percepción y relación con el entorno y por extensión de las dificultades añadidas con las que lidian quienes se encargan de su atención en los centros especializados. De momento, en el marco de las iniciativas sociales de los balcones, el aplauso de esta noche del 2 de abril va ya para quienes conviven con el autismo, por eso se hace un llamamiento para quienes salgan a sus balcones para aplaudir lo hagan también con alguna prenda de color azul como símbolo de esta afección.
