Jonathan es uno de los tantos héroes que se cruzan en el camino de una persona para salvarle la vida. El pasado fin de semana Jonathan recibía la llamada de la novia de uno de sus ex amigos. “Ya no tenía mucho contacto con él. El chico cuando bebía se ponía agresivo”, así define al presunto autor de una agresión que podría haber tenido un desenlace fatal.
“Me llamó por teléfono pidiendo auxilio, diciendo ‘ayuda por favor, que me mata'”. En ese momento, Jonathan acude a la vivienda y cuando entró, vio a la agredida tirada en el suelo. “Le había clavado unas tijeras. Él estaba muy agresivo”, relata en exclusiva para Diario de Alicante.
“La dejé en una habitación”, cuenta Jonathan, que fue acompañado por su pareja que mientras auxiliaba a la mujer agredida. El agresor “intentó entrar, finalmente abrió la puerta, cogió un mueble e intentó tirárselo”, cuenta.
Jonathan bajó al agresor a la calle, intentando relajarle y hacerle entender la locura que estaba cometiendo. Pero él quería más. Volvió a subir a casa, cogió un objeto que Jonathan logró quitarle, pero se acercó a la víctima “y le dio un tortazo muy fuerte”. Seguidamente, asegura Jonathan, fue directo a la cocina a coger un cuchillo. “Tuve que paralizarlo, tirarme encima de él. Mi pareja se acercó para intentar apaciguar la situación. Pero él la engancha, la coge del pelo y le lanza un puñetazo”, afirma.
Finalmente, consiguieron llamar a la policía. “Testificamos todo lo sucedido. Él tiró el pantalón de ella con sangre por el balcón, pero la policía vio la herida. Al final le detuvieron”, añaden. Jonathan, además, reconoce que la víctima, al principio, dijo que no tenía nada “por miedo”.
Jonathan apareció en ese preciso instante y salvó la vida a esta joven. El desenlace podría haber sido fatal. “Me gustaría decirle al ciudadano que no tenga miedo con este tipo de gente”, explica Jonathan refiriéndose a la hora de actuar cuando presenciemos una situación similar. “Que le echen valor, está la policía, y a este tipo de gente hay que encerrarlos o tratarlos, porque son capaces de todo. Incluso de matar”, concluye.
Este periódico ha tenido acceso al informe de urgencias de Jonathan y su pareja, que fueron acompañados por la Policía Nacional tras recibir las agresiones del detenido.
