Iván Cano nace un 7 de mayo del año 1995, y a día de hoy se ha convertido en todo un referente en el deporte adaptado. Concretamente, en la disciplina de atletismo. Aunque sus inicios fueron algo tardíos: “Empecé a hacer atletismo con 15 años”, explica Iván Cano a Diario de Alicante. De hecho, antes de atletismo, probó varios deportes, como taewkondo. “Cuando me saqué el cinturón negro decidí que quería probar otra cosa. Me quedé con el atletismo porque era el que más me gustaba y más me encajaba”, cuenta Iván.

¿Y por qué atletismo? Iván Cano recuerda que siempre le había gustado correr y saltar rápido, algo que por cierto se le daba bastante bien. “Se me daba bien saltar y correr. Mis padres creían que se podía sacar algo de partido a esas cualidades”, reconoce.

Algo fundamental fue el apoyo de su familia. “En todo momento les pareció perfecto”, asegura. “Me han apoyado siempre. Me han llevado a la pista y competiciones y todas esas cosas que poco a poco empezaban a salir gracias al atletismo”, añade.

Iván reconoce que en un primer momento sus compañeros le sacaban bastante ventaja en el aspecto técnico. “Yo llegué siendo el peor de todos, y al final con constancia, año tras año, con mucho esfuerzo y ganas fui mejorando. Empecé a destacar a nivel provincial, autonómico, y ya finalmente a nivel nacional e internacional”, explica.

Un sueño olímpico hecho realidad

De hecho, fue en 2014 cuando le seleccionaron por primera vez para un campeonato en Europa. “Ahí es cuando empezó realmente mi debut internacional”.

Y durante estos años han sido muchas las alegrías obtenidas. Hasta 2021, un año especial en el que Iván ha podido cumplir un sueño: ser medallista olímpico en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020. “Es una promesa que te haces contigo mismo cuando quieres dedicarte a esto de manera profesional. Y cuando lo consigues, no sólo es el hecho de haber conseguido una medalla. Esa medalla representa mucho más. Representa toda una trayectoria, el trabajo que llevas detrás durante tantos años”, cuenta un Iván Cano emocionado.

“Estoy súper contento y satisfecho”, explica, aunque tiene ganas de más. “Me sentía preparado para saltar más, pero las cosas no salieron como hubiese sido perfecto. Eso es lo bueno de este deporte, que te da más oportunidades para volver a intentarlo. Y te deja con ganas de seguir”, asegura Iván.

Respecto a la experiencia en Tokio, en sus primeros juegos paralímpicos, Iván recuerda esos días como algo “totalmente diferente a otros campeonatos. Es gente de tantos deportes y países juntos conviviendo… Es espectacular”. Aunque este año ha quedado una espinita clavada, ya que a raíz del COVID19 las relaciones sociales se han reducido al mínimo. Por eso, Iván ya piensa en los próximos juegos, en los que “ya no será así, y eso te hace tener más ilusión por lo que está por venir”.

Amplio reconocimiento a su trayectoria

Iván Cano comienza a ser consciente de todo lo que está consiguiendo. Aunque a veces cuesta creerlo. “Yo sabía que ir a los juegos era mediático, pero sacar una medalla hizo que se hiciera eco todo el país. Nunca había sentido algo así“, reconoce.

De hecho, recientemente se le ha otorgado la Distinción de la Generalitat Valenciana al Mérito Deportivo. También recibía la distinción de Mejor Deportista con diversidad funcional de la provincia de Alicante. El alicantino lo describe como “un honor estar entre ese pequeño grupo de personas” con estas distinciones. “Estoy todavía en una nube. No me lo termino de creer. Pero la gente que me rodea se lo cree por mi, y yo me siento muy orgulloso de lo que he hecho y de que la gente lo valore”, añade el alicantino.

Son muchos los niños y niñas los que mirarán con orgullo a Iván Cano, medallista paralímpico alicantino. Que se dice pronto. Y para esos niños que sueñan con llegar donde él ha llegado, Iván tiene un mensaje: “Nunca sabemos si podemos llegar. Llegar o no, no dependerá muchas veces sólo de ti. Quizá dependerá de otras cosas, pero lo que puedes hacer como deportista es ser constante en tu trabajo. La constancia te lleva por el buen camino y te lleva a conseguir las cosas que los deportistas hemos conseguido”, concluye.