La búsqueda de nuevas soluciones a viejos problemas, como es la cistitis o infección de orina, llevó a dos estudiantes de Biotecnología de la Universidad Miguel Hernández a investigar una alternativa a los antibióticos para su tratamiento.
Su proyecto empresarial arrancó en pandemia, en 2020, después de que a una de ellas le recetaran antibióticos por una cistitis “cuando es solo un picor”, asegura Carolina Alcaide Medina, una de las cofundadoras y CEO de Hygia Sensitive.
Durante su investigación se toparon con la maratón de empresas que promueve la Universidad. “Pedían ideas innovadoras y pensamos ¿por qué no?”, confiesa esta emprendedora. Acabaron ganando el concurso y crearon una startup sumando a la UMH como socia. Han desarrollado Cistifree, una gama de geles íntimos no antibióticos para tratar la cistitis.
Su paso por la maratón fue clave porque “somos biotecnólogas científicas sin idea de empresa”, explica. En total han ganado seis premios, la maratón, el programa Explorer “Jóvenes con Soluciones” by Santander X, Fundeun y fueron finalistas en los premios ‘5U CV Start-Up’ obteniendo 15.000 euros que han reinvertido.
Actualmente hay tres personas en el equipo: Carolina Alcaide, que además de CEO tiene un máster en cosmética, ya que los productos son cosméticos; Laura Martínez Aznar, más centrada en marketing; y Raúl Bonet García, que asume el área de investigación como CTO y al que también consideran fundador de la empresa.
Comercialización
En noviembre o diciembre de este año saldrán al mercado con Cistifree prebiotics, cuyo principio activo son los prebióticos, porque es mas fácil de desarrollar. El segundo será el producto que dio origen a la startup, Cistifree probiotics, con una investigación más costosa. Les seguirán Cistifree lactic acid y Cistifree complex. El precio de los productos oscila entre los 20 y 30 euros.
El canal elegido para la venta es un ecommerce propio y a medio y largo plazo esperan entrar en el canal farmacia y parafarmacia. Su mercado es nacional e internacional. “Nos centramos en mujeres blancas” porque “en función de la localización geográfica tenemos unas bacterias diferentes en nuestras vaginas y el mercado sería Europa o América del Norte”. “A más largo plazo nos gustaría investigar el microbioma de las mujeres africanas para ver en qué bacterias podríamos intervenir para prevenir la cistitis recurrente”, añade Alcaide.
Su clientela es extensa. “Todas las mujeres pueden sufrir cistitis recurrente en algún momento de la vida”, dice la CEO.
Cistifree Probiotics fue el origen de la startup. “Vimos que la infección de orina está causada por una bacteria que en grandes concentraciones es mala, y comprobamos que cuando hay una aportación elevada de bacterias beneficiosas que están en nuestra vagina, esa bacteria mala disminuye y no causa infección de orina”, explica. El producto requiere de un laboratorio científico para su investigación y quieren patentar el resultado por lo que necesita inversión y saldrá el segundo al mercado. “La patente es una de las principales diferencias con otros productos del mercado” ya que “va a ser efectivo por la investigación científica que ha habido detrás”, según Alcaide.
En el caso de Cistifree Prebiotics son como azúcares que sirven de alimento a las bacterias buenas. “Si les das alimento, crecen y hacen que disminuya la cantidad de bacterias malas”, apunta. En Cistifree lactic acid su principio activo es ácido láctico. “Es un producto que va dirigido a un público que no tenga cistitis recurrente y que puedes usar de forma diaria y comprar en un supermercado”. Es el único que no van a patentar.
Y finalmente, Cistifree complex, es una combinación entre Prebiotics y Probiotics y “confiamos en que cuando están estos productos juntos van a tener una mayor eficacia y también estará patentado”, señala.
