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miércoles, diciembre 3, 2025

El 58% de los fallecidos en un accidente de tráfico en zonas urbanas de Alicante es motorista

Según datos proporcionados por la Asociación Profesional de Empresas Formadoras en Seguridad Vial, los motoristas fallecidos en accidente de tráfico han aumentado en 8 años en un 42% en la provincia

En la provincia de Alicante, cada año se producen alrededor de 2.500 accidentes con víctimas en zonas urbanas, que dejan más de 3.000 heridos de distinta gravedad. Según la Asociación Profesional de Empresas Formadoras en Seguridad Vial, Formaster, preocupa especialmente que el 33,4% de las personas accidentadas en estos siniestros sean motoristas, un dato que, a juicio de la entidad, pone de manifiesto el elevado grado de siniestralidad de este tipo de vehículos en entornos urbanos.

Dentro de la gravedad de los accidentes de motos en calles y travesías de Alicante, la asociación destaca que el 57,7% de los fallecidos en un siniestro vial en vías urbanas eran motoristas. Además, por cada diez accidentes que se producen en ciudad, cuatro implican a conductores de motos. Estas cifras, según Formaster, deben hacer reflexionar, especialmente por el incremento del 42,8% en el número de motoristas fallecidos en la provincia en los últimos ocho años, tanto en carreteras como en vías urbanas.

“Es alarmante cómo nos hemos anestesiado como sociedad ante las graves cifras de siniestralidad que estamos teniendo, incluyendo las relacionadas con los motoristas. Se habla de los accidentes de estos vehículos en carretera, pero también debemos poner el foco en los accidentes en ciudad. Las zonas urbanas son igual de peligrosas y el motorista debe ser consciente de los riesgos porque su cuerpo es la carrocería. Todos debemos de poner de nuestra parte, formadores, consistorios y administraciones, conductores en hacer los viajes en moto más seguros”, ha expresado Antonio Macedo, presidente de Formaster.

Cambios en los exámenes del carné A para motos

Desde este mes de julio, la DGT ha introducido modificaciones en los exámenes para acceder al carné A, correspondiente a motocicletas de gran cilindrada. Según explica la asociación, el objetivo es mejorar la formación de los futuros conductores y reducir las tasas de siniestralidad, que han crecido en los últimos años.

Entre las novedades, se establece que para obtener este permiso es necesario tener al menos 20 años y contar con dos años de antigüedad del carné A2. Además, se amplía la formación práctica: los aspirantes deberán realizar dos horas en circuito cerrado y cuatro horas en circulación real, con al menos la mitad de estas últimas en carreteras convencionales. Durante las prácticas en vías abiertas, los instructores seguirán a los alumnos en motocicleta, con un máximo de tres por formador, mientras que en las maniobras en circuito cerrado un profesor supervisará a un máximo de cinco aspirantes a la vez.

Otra medida es la obligatoriedad del uso de chaleco airbag tanto para alumnos como para instructores durante las prácticas, un dispositivo que, según la asociación, ha demostrado ser clave para reducir la gravedad de las lesiones en caso de accidente, especialmente en la zona torácica.

En el ámbito teórico, se incorpora formación sobre sistemas avanzados de asistencia a la conducción para motos (ARAS), como frenada automática, control de tracción, ABS en curvas o avisos de colisión. Formaster subraya que estos sistemas ayudan a prevenir accidentes o a disminuir su gravedad.