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jueves, 28 marzo 2024

Funcionarios de prisiones se concentran por las agresiones que sufren

En Alicante han asistido, entre otros, el alcalde y el presidente de la Diputación. Hasta intentos de secuestro es lo que viven a diario.


Los trabajadores de las prisiones alicantinas de Villena y Fontcalent (Cumplimiento y Psiquiátrico) se han concentrado esta mañana en la Plaza de la Montañeta, sede de la subdelegación del Gobierno en Alicante.

Imagen: TAMPM Prisiones

Al acto han asistido más de un centenar de trabajadores de ambas prisiones alicantinas, con mascarillas y distancia de seguridad, así como la abogada de la asociación. Además, Luís Barcala, alcalde de Alicante y Carlos Mazón, presidente de la Diputación, les han mostrado su total apoyo. También han asistido entre otros, Juan de Dios Navarro, Secretario de Organización del PP de Alicante, Eduardo Ruiz Navarro y David García, diputado nacional y en Les Corts por VOX respectivamente, y Rafa Más, concejal de Compromís en el Ayuntamiento de Alicante.

Han sido convocados por la asociación profesional de trabajadores penitenciarios “Tu Abandono Me Puede Matar” (TAMPM), para protestar nuevamente por el abandono y degradación que está
sufriendo la institución penitenciaria durante décadas. Como vienen denunciando desde hace tiempo, y más durante este año pandémico, se sienten totalmente desprotegidos ante agresiones graves de los internos.

Agresiones, humillaciones, amenazas e intento de secuestro

Tal y como indican desde TAMPM Prisiones, el pasado viernes día 12, “un interno destrozó literalmente la cabeza a otro en el patio de
la prisión de Archidona en Málaga”. Tal hecho, provocó su muerte. Una tragedia que los funcionarios de prisiones no pueden evitar, “por estar atados de pies y manos”.

Este tipo de situaciones son algo habitual en el mundo de las prisiones. De hecho, ese mismo día en el centro penitenciario Las Palmas, varios internos intentaron secuestrar a un trabajador de la prisión, al que además apuñalaron en el costado con un arma blanca.

Unos días antes, en una prisión gallega, un interno roció los ojos a varios funcionarios con lejía. Algo que también sucedió hace poco más de un mes, en la prisión de Villena.

Historias espeluznantes como estas forman parte del día a día de los funcionarios de prisiones, por lo que no es de extrañar que se concentren para pedir más protección y medidas de seguridad.

“Sentimos la tragedia cada día en este trabajo tan difícil y tan poco valorado”

TAMPM Prisiones



En el acto de esta mañana han denunciado las continuas vejaciones y humillaciones que sufren en las cárceles por parte de los internos más conflictivo. Aproximadamente, un 30% de los reclusos. Condenados por delitos graves, estos internos claramente ponen en riesgo la vida no solo de los trabajadores sino de sus compañeros de celda o patio.

Reclaman ser considerados “agentes de la autoridad”

Y ante cualquier altercado, los funcionarios “siguen vendidos”, ya que no tienen medios para disolverlo sin poner en riesgo su vida. Ni tan siquiera son considerados “agentes de la autoridad”, como vienen reclamando desde hace mucho. Algo incomprensible ya uno de sus cometidos es la custodia y control de las personas privadas de libertad. Muchos de los presos con los que tratan a diario son “criminales con delitos de asesinato, violaciones y lesiones graves. Algunos incluso pertenecen a bandas o grupos de delicuencia organizada”.

Por todo lo descrito, desde TAMPM exigen, por un lado, un estatuto propio de prisiones, a fin de mejorar los derechos laborales del colectivo y, por otro, el compromiso de Instituciones Penitenciares de ofrecer un servicio público de calidad, protegiendo a sus trabajadores.

“Las políticas permisivas hacia los reclusos violentos, refuerzan el peligro al que nos enfrentamos. Estamos hartos de que nos miren a nosotros con lupa”, explican desde TAMPM.

“El Ministerio del Interior oculta graves altercados en prisiones”

TAMPM Prisiones

Desde la asociación afirman que “el ministro Marlaska no cuenta la verdad de lo que sucede en prisiones” y por ello le lanzan el siguiente mensaje:

“No señor Ministro, no todos los internos son los débiles, los
débiles, que soportamos además sus continuas humillaciones, somos los trabajadores. Los internos no trabajan para conseguir una sociedad más justa, somos los trabajadores los que intentamos, con nuestra profesionalidad y sin apenas medios, ayudar a que los
internos, que estén dispuestos a ello, cambien su conducta y retornen a la sociedad con garantías”. También le recuerdan que “les garantizó unos derechos laborales justos cuando estaba en la oposición”.