Centenares de celadores de toda la Comunidad Valenciana se han concentrado este mediodía en las puertas de sus centros hospitalarios para sumarse a la exigencia de que se les considere “personal de riesgo” y así tener la protección respecto a las condiciones laborales, en especial a los protocolos de seguridad y EPI’s que esto implica. En la provincia de Alicante se han adherido el Hospital General, San Juan y la Marina Baixa.
Esta concentración, a la que en esta ocasión se suman diez centros hospitalarios valencianos, se da simultáneamente en todo el estado español con 83 centros, con los celadores y celadoras reivindicando que cambie su situación “y más teniendo en cuenta que en plena pandemia el Ministro Illa decidió que no éramos personal de riesgo cuando somos nosotros los que en muchas ocasiones, recibimos, movilizamos y estamos en contacto directo con los pacientes porque puedan ser atendidos”, como explica Teresa Sebastià, una de las representantes de estos trabajadores, a Diario de Alicante
Por otro lado, entre los puntos reivindicados en esta tercera concentración nacional, y la segunda a la cual se suman los centros valencianos, es la del reconocimiento de una formación específica para desarrollar la tarea de celador. Dado que el estatuto que regula sus funciones, es de 1971 y poco tienen que ver con los conocimientos que se requiere actualmente a estas trabajadoras y trabajadores de las cuales, el 60 % son mujeres.
“Nosotros nos preparamos unas oposiciones con preguntas concretas y específicas que hay que saber para atender las personas que pasan por nuestras manos, pero en cambio, resulta que los celadores nos regimos por unos estatutos del año 1971 en el que como tareas se nos asignan poca cosa más que vigilar las entradas y cerrar y abrir puertas y ventanas…y esa no es nuestra realidad”, apunta esta representante de los celadores.
Con todo, a la una de este mediodía, las concentraciones se han repetido a las puertas de los principales hospitales valencianos para reivindicar la defensa de una calificación, la de “personal de riesgo” que, de momento, no se reconoce.
Esta plataforma de ámbito nacional por el reconocimiento de los celadores como personal de riesgo se inició en plena pandemia con 4 o 5 celadores que se revelaron y en la actualidad cuenta ya con más de 12.000 personas que entienden y apoyan a su situación.
