El actor Manolo Zarzo ha fallecido a los 93 años, dejando atrás una de las trayectorias más longevas y prolíficas del cine, el teatro y la televisión en España. Su familia ha comunicado que la despedida se celebrará en la más estricta intimidad.
Por su último trabajo, el cortometraje El nuevo barrio, había recibido el premio a Mejor Actor en el Festival de Cine de Comedia Tarazona y Moncayo.
Día tras día, largometraje con el que debutó en 1951; El pescador de coplas, Sierra maldita, Saeta del Ruiseñor, Margarita se llama mi amor, Los guardiamarinas, El abuelo tiene un plan, Lo verde empieza en los Pirineos, Los nuevos españoles, Los golfos, Llanto por un bandido, La colmena, Los santos inocentes, Entre tinieblas, Luces de bohemia, El Lute, camina o revienta y Tiovivo c 1950 son solo una pequeña muestra de las películas en las que participó el intérprete madrileño, que hizo comedia, drama, western, serie B y numerosas coproducciones con Italia y Francia en las que tuvo como compañeros de fotogramas a Edward G. Robinson, Marcello Mastroianni, Nino Manfredi, Alberto Sordi, Monica Vitti, Terence Stamp y Giulliano Gemma, entre otros. Aunque nunca tuvo ocasión de interpretar ningún papel principal, este “obrero de la interpretación», como se consideraba a sí mismo, demostró su versatilidad y talento como actor de reparto.
Biografía
Zarzo nació en 1932, en el madrileño barrio de Ventas, y era el menor de ocho hermanos de una familia obrera. Desde pequeño frecuentaba el teatro, lo que despertó su vocación por la actuación desde bien joven. Su carrera artística comenzó en 1948, cuando ingresó en una compañía de teatro juvenil a los 16 años, con la que estuvo recorriendo España varias temporadas. Desde que en 1951 fue descubierto por Antonio del Amo y saltó a la gran pantalla en Día tras día, no dejó de hacer cine.
Un rostro imprescindible del audiovisual español
Su debut cinematográfico se produjo en 1951, y desde entonces participó en títulos emblemáticos del cine español. En televisión, su presencia se volvió habitual en series como El Súper, Los hombres de Paco, Cuéntame cómo pasó o Servir y proteger, donde interpretó papeles que conectaron con el gran público.
Además de su versatilidad interpretativa, fue testigo y protagonista de distintas etapas del audiovisual español, desde la posguerra hasta el boom de las series en el siglo XXI.
Vida marcada por la vocación y la entrega
Más allá de su carrera, Zarzo vivió episodios personales extraordinarios. Uno de ellos fue su arriesgada intervención para salvar a una joven de un incendio, lo que casi le cuesta la vida. Este hecho, lejos de retirarlo, reforzó aún más su compromiso con la vida y su pasión por la interpretación.
Tuvo cinco hijos, dos matrimonios y fue pareja en su juventud de la también actriz Lina Morgan. Siempre se mantuvo cercano al oficio, y recibió numerosos reconocimientos en sus últimos años por su contribución al cine y la televisión.
Con su fallecimiento, desaparece uno de los últimos grandes nombres de la época dorada del cine español. Su legado permanece a través de cientos de personajes y una vida dedicada a emocionar desde la pantalla y los escenarios.
