La Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de El Campello (Alicante) ha diseñado una campaña de animación a la lectura dirigida a alumnado de tercer y cuarto curso de primaria, titulada ‘Rafael Altamira, el escritor de la paz’, en base a que el autor fue propuesto en dos ocasiones a Premio Nobel de la Paz, solicitudes que fueron respaldadas por destacados intelectuales españoles y europeos.
La iniciativa tiene dos fases: una pre-campaña en los colegios públicos (que se desarrollará los días 18 y 19 de febrero), y un programa de actividades en la biblioteca que lleva su nombre -Biblioteca Municipal Rafael Altamira-, que se sucederán del 6 al 21 de marzo, según ha indicado el consistorio en un comunicado.
Los objetivos de la campaña son incentivar la lectura, introducir al alumnado en la biografía de Rafael Altamira y, por último, dialogar sobre escritura y paz, «facetas en las que destacó durante toda su vida profesional el ilustre personaje».
Se parte de la convicción de que la paz «es un derecho humano de todas las personas, que tienen derecho a una paz justa, sostenible y duradera, y esta no solo implica la ausencia de conflictos armados, internos o internacionales, sino que debe ser entendida como un concepto amplio que engloba múltiples derechos, entre ellos los de ser educado conforme a la seguridad humana y a vivir en un entorno seguro y sano».
Las jornadas trasladarán al alumnado campellero conceptos como «el derecho a la resistencia contra la opresión de los regímenes que violan los derechos humanos, el derecho a exigir a todos los estados un desarme general, las libertades de pensamientos, opinión, expresión, conciencia y religión, y el derecho a la justicia, a la verdad y a la reparación».
«Hoy más que nunca, queremos hablar de Rafael Altamira, un hombre de paz que, con sus pensamientos expresados por medio de la escritura, sin duda alguna contribuyó a todos los tratados de paz de su tiempo», ha expresado la concejala de Cultura, Dorian Gomis.
Rafael Altamira y El Campello
Los restos mortales de Rafael Altamira han regresado a El Campello, «como era su voluntad», tras tres años de «gestiones y esfuerzos», y junto con los de su esposa Pilar Redondo descansan ya en el cementerio del municipio.
Altamira siempre expresó su deseo de ser enterrado en esta localidad, con la que mantenía «un vínculo muy estrecho con su vida», pues fue escenario de su infancia y juventud. En este municipio alicantino residieron –en la Finca Terol, en el actual Barrio de la Cruz– y están enterrados sus padres y sus abuelos, y actualmente continúan residiendo tres de sus bisnietos.
Su «especial vinculación» a El Campello también fue plasmada en sus memorias: «Lo que debo a mi padre: laboriosidad, conciencia del deber, aunque no guste; sentimiento de benevolencia y caridad: El Campello y las visitas a los enfermos», escribió.
Por toda su trayectoria, la Concejalía de Cultura ha encargado a la compañía Contes de Ca’La’Bassa acciones «para resaltar la figura de Altamira y hablar sobre la paz», y así acercar su biografía a la población escolar por medio de la narración, el arte y la escritura.
Tres talleres culturales
En concreto, se impartirán tres talleres. El primero de ellos girará en torno a ‘La escritura como canal de transmisión de la paz’, con explicaciones de la sala infantil y actividades relacionadas con estas temáticas.
El segundo se centrará en el espacio teatral. Bajo el título ‘El teatro como construcción de la paz’, se considera esta manifestación artística como «una herramienta que permite construir espacios para soñar, para creer en las cosas imposibles, para detenerse por un instante y colocarse en los zapatos del otro, para regalar un abrazo sin temor».
El tercero de los talleres, ‘El arte como medio de construcción de paz’, será una forma de comunicar, de transmitir ideas, sentimientos y emociones. El alcance social que puede tener el arte también lo convierte en «una forma de generar espacios y alternativas para construir paz».
El arte es «muy valorado» en procesos de transición democrática hacia una paz sostenible y tiene la capacidad de transformar realidades. Los escolares conocerán diferentes cuadros que hablan de esta temática, escucharán música pacifista y construirán una escultura dedicada a la paz.
