La Unión Profesional Sanitaria de Alicante (UPSANA), de la que forma parte el Colegio de Enfermería de Alicante, ha puesto de relieve durante la reciente celebración de la X Gala de la Salud las graves consecuencias que el intrusismo profesional ha provocado en el ámbito sanitario, tanto para las propias profesiones como para la sociedad en general.
Según destaca el Colegio de Enfermería de Alicante, la Enfermería ha sido una de las profesiones más afectadas por este problema, y la institución ha mantenido históricamente una actitud firme y contundente contra cualquier persona, colectivo, empresa o entidad que haya podido incurrir en este tipo de delitos.
En este sentido, han explicado que, además del trabajo institucional de la Junta de Gobierno, su Asesoría Jurídica y Fiscal ha dispuesto de los recursos y mecanismos legales necesarios para abordar estas situaciones con las máximas garantías de éxito.
El Colegio ha apuntado que entre los casos más habituales se ha encontrado la práctica de funciones propias de la enfermería por parte de personas sin titulación o por técnicos de Formación Profesional que han actuado fuera de su ámbito competencial. La manipulación de pacientes, la administración de contrastes o medicamentos y la extracción de sangre han sido algunos de los ejemplos frente a los que la organización ha afirmado haber respondido con firmeza, incluso recurriendo a la vía judicial cuando ha sido necesario.
Desde la entidad colegial han advertido de que el intento de reducir costes mediante la contratación de personal con menor remuneración ha estado detrás de muchas de estas prácticas, junto con la voluntad de algunos de abarcar competencias que no les corresponden. Según han añadido, esta situación se ha repetido especialmente en las residencias de mayores, donde personal auxiliar ha llegado a realizar funciones propias de enfermeras, con el consiguiente riesgo para la salud de personas especialmente vulnerables.
El Colegio sostiene que el ahorro económico que se ha perseguido con estas conductas puede haber acabado resultando muy caro en términos de salud, ya que quienes las han ejecutado carecen de la formación y los conocimientos necesarios.
Asimismo, ha alertado de que las mujeres embarazadas han constituido otro grupo especialmente vulnerable. En este sentido, ha advertido del riesgo que han supuesto figuras como la de la doula, cuyas actuaciones han podido poner en peligro tanto la vida de la madre como la del bebé al aplicar prácticas contrarias a la atención sanitaria adecuada durante el embarazo.
El listado de situaciones derivadas del intrusismo, según han señalado desde el Colegio, se ha podido ampliar con otras muchas, como la administración de medicamentos por vía intramuscular en zonas rurales por personal no cualificado o la actuación de cuidadores domiciliarios que se han excedido en sus competencias.
Todas estas prácticas, han concluido desde el Colegio de Enfermería de Alicante, han comprometido la seguridad y la salud de las personas, han desprestigiado la profesión, han generado confusión social sobre las competencias enfermeras y han supuesto una forma de competencia desleal hacia quienes ejercen legalmente.
