Compromís ha denunciado en rueda de prensa lo que califica como un «rescate público de más de 107 millones de euros» a la empresa Ribera Salud, aprobado por el Consell el pasado enero a través de aumentos “injustificados” en la cápita sanitaria que paga la Generalitat por la gestión de departamentos privatizados. Según la formación, se trata de una cuantía fija por persona asignada a cada departamento, con independencia de que utilice o no la sanidad pública.
Según ha explicado Compromís, la cifra exacta asciende a 107.087.880,54 euros, correspondiente a incrementos de la cápita que «superan en muchos casos el 10%«, pese a que el contrato de prórroga del departamento del Vinalopó contemplaba únicamente un aumento máximo del 1,5%.
La formación ha señalado que estos incrementos se aprobaron en la comisión mixta de seguimiento entre la Generalitat y la empresa concesionaria, en una reunión celebrada el 8 de enero, a la que asistió el CEO de Ribera Salud, Pablo Gallart, y que tuvo una duración aproximada de 10 minutos. En esa reunión se aprobaron “revisiones anuales con unos cálculos a favor de la empresa que nunca se habían realizado de esa forma”, según sostiene Compromís. Explican que también incluían liquidaciones pendientes de los departamentos de Dénia, Torrevieja y Elx-Crevillent correspondientes a los ejercicios 2020, 2021 y 2022.
Compromís ha remarcado que, aunque la revisión de las cuantías contractuales es un procedimiento anual, nunca se habían aprobado incrementos de esta magnitud. Como consecuencia, a partir de 2025 la cápita que percibirá Ribera Salud por la gestión del departamento del Vinalopó, el único que continúa privatizado, alcanzará los 1.066,44 euros por persona, más del doble de la cuantía inicial de 494,72 euros.
Desde Compromís se han referido también la reciente adquisición del Hospital Clínica Benidorm por unos 120 millones de euros, una operación que la formación menciona en el contexto de su crítica a la gestión sanitaria del Consell. Según defienden, se trata de una clínica privada que recibe numerosas derivaciones de hospitales públicos y que “está dirigida por el hermano del conseller de Sanidad”, Marciano Gómez.
Desde Compromís sostienen que, mientras “la sanidad pública se degrada con colas y listas de espera interminables”, el Consell estaría priorizando otros intereses. A su juicio, “el gobierno del PP regala más de 100 millones a una empresa privada” que continúa gestionando el hospital público del Vinalopó, en lugar de destinar esos recursos a reforzar la atención primaria y avanzar en la reversión de las concesiones sanitarias
Por todo ello, la formación exige la reversión inmediata del departamento del Vinalopó a la gestión pública, la comparecencia del conseller de Sanidad en Les Corts para dar explicaciones y su dimisión, además de la activación de la comisión de investigación parlamentaria registrada sobre la prórroga y el mantenimiento del último hospital privatizado del sistema sanitario valenciano.
