Tres perros fueron rescatados,el pasado mes de enero, en un estado lamentable de una casa particular en la Isla de Tabarca. Los canes presentaban graves síntomas de desnutrición y serios problemas de salud, como consecuencia de haber vivido supuestamente en unas condiciones higiénicas deplorables.
Según nos informan algunos testigos, los animales vivían encerrados entre escombros, heces y sus propios orines. Presuntamente, los perros llevaban tres años sin ver la luz del sol y estaban siendo maltratados por la persona que los tenía a su cargo. Además, los testigos insisten que llevaban tres años denunciando este caso, no solo a través de la Policía Local y el Seprona, sino en el Ayuntamiento de Alicante. Y desconocen porqué no se actuó antes.
Desde Concejalía de Protección Animal, nos indican que la denuncia administrativa entró por registro el pasado 8 de enero y de inmediato los técnicos se pusieron a trabajar en ello. Funcionarias del Consistorio se desplazaron hasta la Isla de Tabarca para hablar con el responsable de los canes y comprobar el estado de los mismos. Comprobaron que su dueño tenía muy pocos recursos y acordaron con él la cesión de los perros el 17 de enero. Inmediatamente, fueron llevados al albergue de animales de Bacarot.
Tras las investigaciones pertinentes y comprobar si tenían chip identificativo, descubrieron que uno de ellos pertenecía a una señora que había fallecido. Esto ha ralentizado los trámites, puesto que tenían que solicitar la situación de abandono de la perrita por fallecimiento de su dueña, para, posteriormente, poder entregarla en adopción de forma legal.
Actualmente, los perros se encuentran en casas de acogida y se están recuperando de sus lesiones, que eran bastante graves.
Uno de ellos, un dálmata, tenía un tumor enorme por el que ha tenido que ser operado de urgencia y ahora se recupera favorablemente.
Además, tenía una infección de oídos muy seria. Otro, un labrador tiene leshmania avanzada y está recibiendo tratamiento por ello. Y, la otra, Perla, estaba en estado severo de desnutrición, con anemia, ciega y plagada de pulgas y garrapatas.
Recalcar que los gastos veterinarios de la recuperación de estos animales lo están asumiendo personas particulares, que también han presentado la denuncia correspondiente. Lamentablemente, es algo habitual en este tipo de casos.
Las personas denunciantes no tienen mucha esperanza en que se abran diligencias ni que el caso se lleve al juzgado, a pesar de que podría constituir un caso de maltrato animal por omisión de tratamiento, tipificado en el actual Código Penal. Pero, tal y como afirman, la mayoría de denuncias se queda en nada y los responsables no pagan.
Además, insisten en que no han hecho público antes este caso por la seguridad de los animales ya que tenían miedo de que desaparecieran o les pasara algo más grave aún. Afirman que muchos vecinos tenían miedo hasta de denunciar.
Dignidad Animal, asociación por los derechos de los animales, ha querido apoyar a las personas responsables ahora de los canes y también ha tramitado una denuncia en el Ayuntamiento en base al incumplimiento de varios artículos de la ordenanza municipal, en materia de protección animal.