El presidente del Sindicato Central de Regantes del Trasvase Tajo-Segura (Scrats), Lucas Jiménez, ha criticado la “cierta prepotencia” que viene de Madrid hacia una preocupación que “no es fingida, sino que afecta a miles de familias que no saben con qué agua dispondrán en los próximos meses”.
Con este trasvase cero del Ministerio “toda la agricultura en el Mediterráneo quiebra”, ha dicho Jiménez momentos después de reunirse la Junta General del Sindicato Central de Regantes y con el delegado del Gobierno de Murcia, Francisco Jiménez.
“Teníamos unas previsiones ajustadas a las reglas de explotación del trasvase, detalladas, para que no faltara agua y los técnicos dicen que se trasvase pero el Ministerio hace lo contrario”, ha reprobado el presidente del Scrats, quien ha vuelto a asegurar que recurrirán el acuerdo del Ministerio, “una orden descaradamente falsa”.
Asimismo, han acordado que investigarán con todos los profesionales que puedan encontrar en el país “fórmulas de impago de lo que es un atraco a mano armada, no facilitar agua por justificaciones que son falsas y, al mismo tiempo, pretender que sigamos pagando el tasazo, cuya suma total anual para regadío asciende a cerca de 13 millones de euros, de los que la mitad irían a parar al bote de vaselina del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page”.
Esta tarde, igualmente, propondrán al Círculo del Agua, que tendrá que decidir al respecto, movilizaciones “en continuo y persistentes”, tras lo que ha dejado claro que tampoco abandonarán “a ninguno de nuestros hermanos, como es el Campo de Cartagena, como pretende el Ministerio”.
Y es que, ha señalado, “todas las hectáreas del trasvase son hectáreas declaradas de interés nacional por el Estado hace muchos años”.
En la reunión con el delegado del Gobierno han trasladado que dé trasladado de estas cuestiones al Ministerio de Transición Ecológica y al secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, y se ha preguntado si el Estado “tiene algún tipo de interés porque persista la agricultura de este país”.
“La Delegación no nos ha sabido reconfortar en nada y seguimos adelante, propondremos movilizaciones”, que será el único punto del orden del día de la reunión del Círculo del Agua.
Jiménez, que ha manifestado que la confianza ya la dieron en noviembre con el trasvase cero, ha confesado que personalmente el delegado del Gobierno apoya al sector y es consciente de que “es responsable de puestos de trabajo y una producción que es envidia de Europa, pero él no decide”.
Con esta decisión, ha lamentado, “todas las previsiones quedan rotas, porque se argumenta que nuestro regadío perjudica al Mar Menor, si no se puede regar en el Mar Menor o Cartagena, tampoco existe la desalación, porque está en el entorno del Mar Menor”.
A su juicio, “es indigno que a esta preocupación, la Delegación de Gobierno la traslade al secretario de Estado de Medio Ambiente, que está en algún rincón durmiendo el sueño del arpa”.
Por su parte, Manuel Martínez, presidente de la Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena, ha expresado su rechazo al trasvase cero, “porque no beneficiará en nada al Mar Menor”.
“El argumento de la contaminación difusa al Mar Menor es peregrino y un diagnóstico erróneo y nos utiliza de chivo expiatorio frente a todas las comunidades de regantes del Levante español, que nada tienen que ver con el Mar Menor, ni siquiera están próximos”, ha destacado.
Para concluir, ha puntualizado que lo que el Campo de Cartagena precisa es de “agua de calidad, al igual que todos los regadíos del país”. “Esta decisión es totalmente errónea y contraria a los intereses de la Comar
