Ayer viernes se presentó el Belén Municipal a cargo de la concejal de Fiestas, Mariola Rocamora, junto al alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana. La novedad de este año a destacar es la fortaleza de la Puerta de Crevillente además de tener muy presente la huerta y el palmeral. Para que las puertas del Claustro del Palacio Episcopal pudiese abrir su enorme pórtico de madera para que los visitantes puedan ver el conjunto belenistico, se celebró una serie de actos que comenzaron a las 19:30 en la Plaza del Carmen. Desde esa ubicación se enchufaron las Luces de Navidad y un grupo de bailarinas de la escuela Ana Belén Navarro vestidas con un atuendo simulando a las de unas estrellas, guiaron a los asistentes hasta la Plaza de El Salvador donde se inauguró el Belén Municipal. Alrededor de las 20:00 la niña Alba Luisa Carolina Jiménez Pastor, ganadora del Concurso de Cuentos Navideños organizados por le concejalía de Educación, leyó el Pregón amenizada por el Coro Ginés Pérez de la Parra y la Banda de Música del Conservatorio de Orihuela. Para el próximo martes 5 de diciembre, se encenderán las luces en Orihuela Costa junto al árbol de Navidad, y alrededor de las 17.30 horas, en la explanada del Ayuntamiento, los Coros “Generación Siglo XX”, “Crisol”, y “Alameda del Mar” amenizarán el acto.
Un nacimiento detallado
Según puntualizó Rocamora, el Belén Municipal vuelve a estar en el casco antiguo de la ciudad, donde el lugar emblemático del Palacio Episcopal, por su peculiar belleza arquitectónica, resaltan el nacimiento de Jesús. Destacó también la profundidad de los paisajes, la perspectiva y la panorámica procurando encontrar el realismo visto desde cualquier ángulo. La representación arranca con la anunciación, pasa por Belén y termina en la huida por Egipto, siendo el eje principal, el mismo portal de Belén y la visita de los Reyes Magos. Bascuñana recalcó las novedades añadidas este año y la identidad oriolana incluida en la escenificación belenistico. No obstante, Mariola Rocamora, hizo énfasis en las casas blancas adornadas con celosías, en sus construcciones con piedra y revoques, las casas taller y las figuras que cobran vida. La pormenorizada descripción de la edil de Fiestas, concretando lo que el visitante podría ver en el Belén, trasladaban a quien la escuchaba a la época relatada, donde los oficios tradicionales estaban presentes tales como el de carpintero, el aguador o el agricultor.
Los artífices de montar el Belén corrió a cargo de la Asociación Belenista de Elche, recomendados por la Asociación Belenista de Orihuela que eran los que lo montaban en años anteriores, haciéndose cargo por primera vez el año pasado con la renovación de figuras y construcciones que costaron unos 18.000 euros, puesto que lo que había hasta entonces estaba muy deteriorado, además de tener piezas extraviadas. Sin embargo, con respecto a los desperfectos de las figuras y sus casas, como la desaparición de algún elemento del Belén anterior al 2016, nos comenta Juan Luís Sarabia Campoy, que hasta entonces era el encargado de su instalación y conservación, que mientras estuvo a su cargo ninguna pieza sufrió daño alguno durante los 10 años que fue responsable de montarlo.
Para nacimiento de este año, el visitante debe observar el realismo de las figuras Hebreas, tanto en sus rostros como la sensación de movimientos de sus telas, pudiendo acceder al Claustro de 10 a 14 y de 16:30 a 21 hasta el 7 de enero de 2018, para poderlo disfrutar.
