El Gobierno británico tuvo que actuar “rápidamente y con decisión” imponiendo restricciones más duras en Londres y el sudeste de Inglaterra porque la nueva cepa de coronavirus detectada en la región está “fuera de control”.
Así lo declaró este domingo el ministro de Sanidad británico, Matt Hancock, en la cadena Sky News, donde explicó que la nueva cepa no es más grave, pero sí se propaga más rápidamente. “Es una enfermedad mortal y debemos controlarla, lo cual es más difícil con esta nueva variante”, aseguró, antes de insistir en que ahora mismo «todo el mundo, en particular quienes viven en regiones designadas como nivel 4 de riesgo deben comportarse como si tuvieran el virus. Esa es la única forma de poder recuperar el control».
La nación se enfrenta a «un momento muy difícil de controlar» hasta que la población sea vacunada de forma masiva, dijo el ministro, que detalló que hasta las 8 de la tarde del sábado habían sido vacunadas 350.000 personas. “Vamos a salir adelante pero nos esperan meses difíciles”, señaló, y prometió que los vacunados alcanzarán el medio millón el fin de semana.
El nuevo confinamiento entró en vigor este domingo, y se mantendrá al menos durante dos semanas, ya que será revisado el 30 de diciembre. Sin embargo, el ministro avanzó que la capital británica podría estar bloqueada “durante meses”, y afirmó que este nuevo cierre solo cuatro días antes de que la población pudiera disfrutar de una ventana de cinco días para celebrara las navidades con sus seres queridos, gracias a que las burbujas podrían mezclarse, “ha sido un terrible final para lo que ha sido un año increíblemente difícil”.
España no cierra fronteras con el Reino Unido
La aparición de una nueva cepa del coronavirus en Reino Unido ha dado un nuevo vuelco en la lucha contra la pandemia de la COVID-19 en el mundo. Hasta 13 países han cancelado vuelos con el país británico, no es la decisión de España que mantiene abierta la vía aérea pero ha anunciado que reforzará en aeropuertos y puertos el control de verificación de pruebas PCR a las personas que procedan del país.
España descarta, por el momento, suspender los transportes con Reino Unido después de que Países Bajos, Bélgica, Austria, Alemania, Italia, Irlanda, Francia y Suecia decidieran cortar comunicaciones ante la propagación de la nueva cepa del coronavirus.
El Ejecutivo de Pedro Sánchez insiste en que defenderá “la necesidad de adoptar medidas coordinadas sobre los vuelos procedentes del Reino Unido” en la reunión de expertos del mecanismo de la Unión Europea de Respuesta Política Integrada a las Crisis (RPIC) que se celebrará hoy a las 11.00 horas.
