La Diputación de Alicante ha concedido, a título póstumo, la Medalla de Oro de la Provincia a dos de sus ex presidentes, Antonio Fernández Valenzuela y a Luisa Pastor Lillo en un pleno extraordinario celebrado hoy. El presidente de la Diputación, César Sánchez, ha presidido este acto que ha contado con la intervención de todos los portavoces políticos y se ha proyectado un video que repasaba la trayectoria de ambos políticos cuando estuvieron al frente de la Diputación.
El Salón de Plenos de la Diputación ha estado desbordado de gente donde no ha podido faltar los familiares de ambos ex presidentes, el ex ministro de Asuntos Exteriores del Gobierno de España, José Manuel García-Margallo, los alcaldes de Alicante, Luis Barcala, y San Vicente del Raspeig, Jesús Villar, entre otros cargos políticos y altos cargos de la Policía Nacional, Guardia Civil y Militar. Los homenajeados estuvieron presidiendo la Diputación de Alicante, entre 1983 y 1991 lo hizo Antonio Fernández, y entre 2011 y 2015, Luisa Pastor y ambos contribuyeron a impulsar el desarrollo económico y social además de mejorar la vida de los ciudadanos de la provincia. César Sánchez ha elogiado la labor de estos dos políticos de formaciones políticas diferentes, resaltando a Luisa Pastor como la primera mujer en presidir la institución. “Con sus distintas personalidades y posicionamientos políticos nos dejaron un gran legado y contribuyeron a hacer de esta tierra un lugar mejor y entendieron que las diputaciones desarrollan un papel fundamental en la gestión de los pequeños municipios, y por eso, hoy Alicante es una provincia prospera que mira al futuro con garantías, posicionada y reconocida a nivel nacional e internacional”, ha expresado Sánchez en su discurso antes de la entrega de las medallas a sus respectivos familiares. Todas las formaciones políticas del hemiciclo han destacado el “compromiso, entrega y dedicación” de los homenajeados.
Fernández Valenzuela falleció el 7 de mayo de este año a la edad de 71 años como consecuencia de un infarto. El distintivo lo recogió su viuda, Emilia Ibiza, y de él se ha dicho que fue un emprendedor, que a pesar de haber nacido en Extremadura pero vino aquí a la provincia con tan sólo diez años, sintiéndose alicantino desde siempre. Durante su etapa como presidente de la institución creó un sentimiento unificador militando en las filas socialistas y el Hogar Provincial ha sido “la niña de sus ojos”, en palabras del discurso que realizó su hijo, ya que, durante su infancia el ex presidente vivió en dicho lugar.
La popular Pastor Lillo falleció el 18 de abril de este mismo año, tras afrontar una larga enfermedad, siendo una trabajadora incansable y honesta que se dedicó a sanear las cuentas de la institución de la cual fue presidenta, y el distintivo lo recogió su hijo José Ramón García Pastor.
Gratitud a sus trabajadores
Después de otorgar las Medallas de Oro Provincial, se ha llevado a cabo en los Jardines del Palacio Provincial un acto de reconocimiento todos los trabajadores jubilados de la Diputación de Alicante. El acto ha contado con más de un centenar de personas que han disfrutado de un concierto a cargo de la Orquesta de Jóvenes de la Provincia de Alicante, OJPA, dirigida por Francisco Maestre. El presidente de la Diputación, Cesar Sánchez, ha elogiado la entrega y dedicación de aquellas personas que en su día formaron parte de la plantilla de la institución que preside, desde sus diferentes departamentos y distintas responsabilidades. Sánchez ha destacado la labor de estos trabajadores que actualmente están jubilados, como piezas fundamentales en el funcionamiento de organismos como el MARQ, el Instituto Juan Gil-Albert o el Patronato de Turismo Costa Blanca, además de hacer posible que los 141 municipios de la provincia tengan las mismas oportunidades.